Granell: "Este será el año, cien por cien, del regreso a Primera"
El ex capitán del Girona charla con AS a cinco días del partido de vuelta de la final del playoff de ascenso ante el Rayo. "Se ve un equipo entero, ganador", comenta.
Si alguien en el Girona ha llorado de alegría y tristeza ha sido, sin duda, Álex Granell (2-08-1988, Girona). Lució, además del brazalete de capitán, la camiseta rojiblanca del primer equipo las últimas seis temporadas hasta que, tras disputar los dos primeros encuentros de esta Liga, optó por poner rumbo al Bolívar. Ha vivido un ascenso a Primera, un descenso a Segunda y tres playoff... es historia del Girona. En los próximos días volverá a La Paz (Bolivia), está apurando sus vacaciones, pero antes quiere ver el ascenso a Primera.
¿Qué se sufre más viendo al Girona a un paso de Primera siendo jugador o de aficionado?
En la grada se sufre muchísimo. Prefiero poder decidir situaciones del partido desde dentro. En la grada se sufre más y lo sé porque estuve en Montilivi contra el Almería en la semifinal y fueron sensaciones muy fuertes.
Tras el 1-2 en Vallecas, el Girona es favorito para subir. ¿Qué sensaciones tiene?
Es una satisfacción brutal y un sentimiento de mucha felicidad. Sabemos lo difícil que es un playoff y los malos momentos que hemos pasado en este club así que la afición y también la plantilla, claro, se merecen un momento bonito. Lo del año pasado fue muy duro así que esperamos olvidarlo y disfrutar mucho el domingo.
Usted sufrió en el terreno de juego la derrota en la final del año pasado ante el Elche. ¿Cómo se puede evitar que vuelva a pasar?
Creo que eso, con el tiempo, son momentos de aprendizaje. Pero se sufre mucho y fue muy duro. Por eso también muchos jugadores que hicimos historia en este club cuando se subió a Primera decidimos dar un paso al lado. Quizás era momento para renovar la energía y la verdad es que el grupo de ahora está muy bien. Están cerca de conseguirlo y lo merecen.
¿Da alguna opción al Rayo de remontar?
En este club hemos vivido de todo, pero soy muy optimista. El equipo y el cuerpo técnico me hacen serlo. Es verdad que hubo playoff, como el que nos remontó el Zaragoza con un 0-3 a favor, pero ahí llevábamos el mazazo del empate ante el Lugo (les dejó sin el ascenso directo en la última jornada) en la mochila. Ahora es distinto porque el final de Liga y en lo que se lleva de playoff se ve un equipo entero, ganador y eso, como aficionado, me permite ser muy positivo.
¿Haberse llevado tantos golpes en los playoff hace que no se pierda nunca la humildad?
Es que esa es la máxima de este equipo, Francisco siempre lo dice, y, además, todo el mundo que llega al Girona sabe la historia real del club y eso hace que seas más prudente de la cuenta por los golpes que nos ha dado el pasado. Aquí nadie se confía y creo, cien por cien, que este será el año del regreso a Primera. Hay la euforia justa para luchar hasta el final y tanto el equipo como la ciudad son ejemplos de esfuerzo y capacidad de superación.
El Girona es, con los números de los últimos años, uno de los mejores clubes de Segunda y se está acostumbrando a luchar por subir con asiduidad...
El trabajo que se está haciendo es fantástico y creo que se recogen los frutos de años y años de esfuerzo. Se ha construido algo importante y si subir a Primera da un impulso a todo incalculable. El año pasado nos quedamos a minutos de ascender y este año volvemos a estar ahí. El ADN que tiene la plantilla actual es fantástico y creo que este año somos como esos equipos que nos han hecho tanto daño en los últimos años. Yo veo que este Girona llega lanzado. Tras vivir un año irregular, pero con un final de Liga tremendo, es como el Elche del año pasado o como aquel Osasuna que nos quitó el ascenso la 2015-16. Llegas al tramo final con mucha energía y ello te hace subir.
¿Se arrepiente de haber dejado el Girona?
Me encantaría estar viviendo este momento, pero no me arrepiento. Quiero mucho a este club, es mi casa, pero sentía, tras perder la final contra el Elche, que debía irme. Viví episodios muy duros y no era un tema profesional. Fue más de salud. Me sentía identificado con el club y creí que era positivo buscar una nueva experiencia y por eso aposté por irme a Bolivia. Necesitaba salir de la zona de confort y ponerme a prueba.
¿Qué opina de la apuesta que se ha hecho esta temporada por la gente joven?
Me representa mucho este equipo. Me encanta ver jugar a Arnau, Ramón Terrats, Gumbau, que Juanpe lleve el brazalete de capitán... Hay muchas cosas de las que sentirse orgulloso. Se ha formado un equipo humilde, trabajador, con mucha ilusión y todo va empujado por las ganas de una juventud que no tiene miedo a nada.
Usted sabe qué es subir a Primera con el Girona. ¿Qué consejo le daría a los que no lo han vivido?
Deportivamente, el ascenso a Primera, es lo mejor que me ha pasado nunca. Fue un día inolvidable y por eso, pase lo que pase, hay que intentar disfrutar mucho de este partido de vuelta porque es único. Es algo excepcional, muy difícil de conseguir y se alcanza un nivel de felicidad inexplicable. Este Girona lo tiene todo para conseguirlo, pero falta materializarlo. Aunque viendo la humildad y el nivel de los jugadores me hace estar tranquilo.
¿Qué valor le da a la figura de Francisco?
Necesitas muy pocos entrenamientos con él para ver que es diferente, excepcional. Tiene una idea de juego versátil y creo que es el ideal para el Girona. Los resultados lo han demostrado y ojalá sea el entrenador que nos lleve otra vez a Primera y nos haga ser un equipo importante. Aunque pase lo que pase, el cuerpo técnico y los jugadores son de Primera.
¿Estará el domingo en Montilivi?
Me encantaría, pero estoy pendiente de cuándo he de volver a La Paz. Ojalá no tenga que volar hasta el lunes y así pueda ir a Montilivi. Disfrutaría mucho.