Garitano reaviva la comuna del gol
Bajo su mando, el Leganés ha crecido en potencial goleador (media de 1,75 frente a los 0,95 anteriores) y autores: siete artilleros en ocho partidos por seis hasta su llegada.
El Leganés nunca fue con Garitano un equipo de artilleros poderosos. “Ser delantero en el Leganés es complicado”, llegó a confesar en una ocasión AS Claudio Beauvue, ariete francés que pasó por Butarque en la 17-18 y que destacaba al entrenador por su alta exigencia de presión, trabajo defensivo y achique de espacios. Lo de hacer gol era importante, pero no tan importante.
Es ése el motivo por el que algunos delanteros que orbitaron en el interés pepinero no acabaron aterrizando al sur de la capital. Porque él, Garitano, no quiere un equipo en el que sus arietes sean los únicos responsables trabajo ofensivo (lo mismo con la defensa), sino que le gusta que la responsabilidades grupales sean una cuestión compartida.
El gol no es de los delanteros
Sirva como ejemplo que en sus cinco anteriores etapas como técnico blanquiazul sólo en las dos primeras un delantero acabó como pichichi del equipo. Fueron Carlos Álvarez (14 dianas) y Chuli (11). En las siguientes tres el trono lo ocuparon mediocampistas: Szymanowski (dos veces) y Gabriel, éste último con apenas cinco tantos en la última temporada de Asier en Butarque antes de su retorno. Ahora, en su vuelta ha recuperado aquel proyecto. La comuna del gol salta a escena.
“Eso es fundamental para nosotros. No es sólo labor de los de arriba aportar [goles]. Nosotros necesitamos que la gente llegue al área. Vaya arriba. Es fundamental para el fútbol actual”, decía el domingo, tras ganar en Oviedo, a preguntas sobre esta aportación colectiva. Aquel partido lo resolvieron un defensa (Javi Hernández, dos dianas) y un extremo (Bua, un gol).
Más goleadores en 8 partidos que en 21
Garitano ha entrenado al equipo en ocho encuentros desde su recontratación como entrenador pepinero. En ese periplo el Leganés ha anotado 14 goles que le hacen sumar una media de 1,75 tantos por encuentro. Buen ritmo del que los delanteros no son responsables absolutos. Esos 14 goles tienen siete padres. A saber, Sabin Merino (3 goles), Kebin Bua (3 goles), Javi Hernández (3 goles), Rubén Pardo (2 goles), Borja Bastón (1 gol), Rober Ibáñez (1 gol) y Omeruo (1 gol).
Reparto amplio que contrasta con los datos de los 21 partidos anteriores. Con Martí al frente, el Leganés anotó 20 goles (media de 0,95), pero con sólo seis autores: Rosales (1), Gaku (1), Arnáiz (4), Sabin (5), Borja Bastón (4) y Juan Muñoz 2). Garitano, en ocho partidos, ha conseguido repartir más la responsabilidad del acierto.
Un asunto que además ya no queda sólo en manos de los delanteros. Si hasta la llegada del entrenador de Bergara los arietes acumulaban el 55% de la puntería (11 dianas), ahora se reparten sólo el 28% (cuatro goles).