El Ajax remonta al Lille en dos minutos trepidantes

El fútbol es un deporte imprevisible y el Lille-Ajax es un ejemplo de ello. El conjunto norteño se puso por delante en el marcador prácticamente sin merecerlo y en su primer tiro a puerta y, justo cuando el partido parecía decantado del lado local, el Ajax remontó en apenas dos minutos en un sprint final espectacular. Tadic, de penalti y el joven Brobbey, le dieron la victoria a los ajaccied.

Se enfrentaban en el Pierre-Mauroy dos equipos que la temporada pasada se habían visto las caras en la Champions League. El Lille, actual líder de la Ligue 1, jugaba ante un Ajax mermado por las bajas, ya que los de Ten Hag no podían contar con Haller, no inscrito por error en la Europa League y con Onana, sancionado durante un año por la UEFA por dopaje.

De forma sorprendente, el Ajax fue muy superior al Lille en la primera parte. Ten Hag, caracterizado por ser un técnico valiente, agresivo y con unos ritmos de juego inalcanzables por los rivales, decidió dormir el encuentro a través de la posesión de balón. Blind se colocaba de tercer central en salida para generar superioridad ante los dos delanteros del Lille y el equipo presionaba como un obús cada vez que perdía la posesión en campo rival.

La única ocasión del primer tiempo fue del lado neerlandés. De hecho, el Lille no sumó ni 30 % de posesión y acabó desquiciado ante las posesiones sin fin de los ajaccied. Antony tuvo un mano a mano contra Maignan, pero el internacional francés lo solventó con una rapidez de felino al taparle todas las opciones de gol al ex de Sao Paulo. Fue la única oportunidad de una primera parte bastante decepcionante por el nivel de ambas plantillas.

La segunda mitad comenzó con el monólogo visitante de salir jugado desde atrás y presionar la pérdida rival con una efusividad desmedida. El Lille, incapaz de encontrar situaciones de peligro, casi aprovecha un error de Lisandro Martínez, pero el centro de Weah, hijo del mítico exjugador del PSG, no encontró rematador. El Ajax tuvo una ocasión clarísima también, esta vez en las botas de Klaasen, que casi aprovecha una delicatessen de Tadic de tacón en el pico del área.

El fútbol es un deporte en el que los goles no se merecen, sino que se marcan. Esta frase, tan aclamada por muchos entrenadores franceses, se hizo viral en el Lille-Ajax. En el primer disparo a puerta del conjunto francés, Timothy Weah adelantó a los dogos. Fue tras un error de Tagliafico, omnipresente durante toda la noche, pero errático en una acción en la que dio un pase hacia atrás con su pierna mala y habilitó al norteamericano para hacer el 1-0.

El Ajax entró en un bucle de errores del que parecía que no podía salir, pero encontró su premio en el tramo final. Tagliafico cayó en el área tras chocar con Renato Sanches, el contacto no existió, pero el árbitro ratificó su decisión tras el VAR comunicarle que podía haber un error. El conjunto neerlandés se creció y no solo eso, sino que dos minutos después del gol de Tadic desde los 11 metros, Brobbey aprovechó un gran pase de Klaasen para llevarse la victoria a Ámsterdam.