Los precandidatos están avisados: necesitan 2.500 firmas si quieren pasar el corte
En el último precedente, en las elecciones del 2015, hubo casi un 10% de firmas invalidadas por la Junta Electoral. Eso quiere decir que el precandidato que venga con menos de 2.500 firmas, podría quedarse fuera del corte.
Algún precandidato está utilizando la recogida de firmas para enseñar músculo sobre el apoyo social que cuenta entre los socios, mientras que otros están luchando duramente, firma a firma, para llegar a la cifra necesaria para ser candidato oficial: 2.257. En cualquier caso, todos son conscientes que el lunes tendrán que entregar en las oficinas del club una cifra superior a la fijada por la Junta Electoral, si no quieren quedarse apeados del proceso electoral a las primeras de cambio.
Y es que el precedente de la última recogida de firmas está en la mente de más de uno de los actuales precandidatos. No en vano, algunos ya vivieron este trance en las elecciones del 2015. En aquella ocasión fue Josep Maria Bartomeu quien se llevó el mayor número de firmas (8.554), por delante de Joan Laporta (4.272), seguido de Agustí Benedito (3.367) y, en último lugar, por Toni Freixa (3.068). Quedaron fuera del corte, Jordi Majó (901), Jordi Farré, que no quiso presentar finalmente las firmas, y Ferran Estrada, que se presentó con once firmas.
Pero en aquel proceso hubo un caso que causó cierto revuelo al quedarse fuera por sólo 16 firmas. Se trataba del representante de Seguiment FC, Joan Batiste, que se quedó en 2.518 firmas, cuando el corte en aquellas elecciones era de 2.534. La situación fue tan tensa que la Junta Electoral llegó a recontarlas hasta en tres ocasiones para confirmar el número final.
Los Estatutos del club precisan que la firma, para ser validada, "sólo se puede dar a un candidato, considerándose nulas todas las papeletas que entregue el mismo socio a otras candidaturas”, asimismo el socio que entregue su firma “ha de estar en el censo electoral”, las papeletas donde se consigna la firma ha de ser “el modelo oficial”, se ha de adjuntar en la papeleta “la fotocopia DNI o el pasaporte, si se es extranjero” y se ha de rellenar completamente “con el nombre del candidato, el número de socio y la fecha de la firma”. Cualquier error en la papeleta se considera firma anulada o no validada.
La conclusión que se extrajo en el 2015 es que alrededor de un 10% de las firmas que se entregaron fueran anuladas por una u otra razón. En el caso de Bartomeu presentó 9.124, de las que se aprobaron 8.554, un 7.3% rechazadas en total, mientras que Laporta entregó 4.802, con 4.272 validadas, un 12%. Por su parte, Benedito recogió 3.815, de las que pasaron el corte 3.367, un 11,8%, mientras que Toni Freixa presentó 3.289, aprobándose 3.068, con un 6,8% no aprobadas.
Así pues, teniendo en cuenta estos datos, que además coincidieron posteriormente con el orden de preferencias en las urnas, parece evidente que el precandidato que se presente este lunes con menos de 2.500 firmas tendrá muy complicado, por no decir casi imposible, pasar el corte de firmas. A día de hoy, sólo hay dos que tienen claras opciones de superar el listón con suficiente margen: Joan Laporta y Víctor Font.