El Fuenla alcanza la siguiente ronda en los penaltis
El equipo de Sandoval se llevó el pase a dieciseisavos de final a costa del Mallorca en un partido copero que fue de menos a más.
El Fuenlabrada pasa de ronda ante el Mallorca tras un partido que fue de menos a más y que acabó con una ronda de penaltis agónica para ambos equipos. La noche helada del Torres se calentó a base de emoción y locura.
El Mallorca inició el partido haciendo valer su calidad superior, dominando sin ningún tipo de problemas el duelo y embotellando al equipo de Sandoval en su campo. Tanto fue así que Trajkovski abrió el marcador para el equipo bermellón en el minuto 11. Gol bonito por parte del futbolista visitante. El mediapunta probó suerte desde fuera del área con un potente disparo a la cepa del área, pero Pol Freixanet pudo hacer más para parar el esférico.
El tanto espabiló a los locales que se fueron acercando tímidamente a la portería defendida por Parera con el paso de los minutos. Acercamientos sin suerte ya que el Fuenlabrada lleva tiempo sin tino en la zona de la alegría: el área rival. Sin embargo, el peso del partido era kiriko gracias a un Mula eléctrico que sacó petróleo en cada una de sus acciones. El Mallorca, mientras, sufría sin exceso en los acercamientos del rival. Nteka, a pase de Mula como no, tuvo la ocasión más clara para los suyos en el 45'.
Espadas por todo lo alto en un duelo caliente pese al frío polar que arreciaba en el estadio de la localidad fuenlabreña.
El paso por los vestuarios no desvió al Fuenlabrada de su camino a la remontada. Mucho más valiente en cada uno de sus acercamientos al área de Parera. Mula tuvo la primera a los pocos minutos de comenzar el segundo acto. Su tiro se desvió y pasó rozando el palo. El Fuenlabrada ya no llamaba la puerta, la aporreaba... Diéguez, en el 55', fue el encargado de derribar la puerta bermellona. En un córner, botado por el de omnipresente Mula, el central cazaba un rechace para poner el resultado en tablas.
Al contrario que al Fuenlabrada, el tanto kiriko sí que noqueó a los de García Plaza. Su sala de máquinas, dirigida por Ruiz de Galarreta y Febas, no pudo hacerse con el balón y sólo las internadas de Murilo, sólo contra todos, generaron peligro para los baleares. Mientras, el Fuenlabrada seguía buscando la portería de Parera dando entrada a Ciss y a Feuillassier, cambio ofensivo este último.
Vio truncada sus aspiraciones de gol el Mallorca al parar Pol un remate de Russo al primer palo. Palada de mérito del portero azulón. Los de García Plaza lo seguiría intentando: primero, Febas con un buen contrataque y luego, Trajkovski con una falta lejana. Sin embargo, la prórroga sobrevolaba el Fernando Torres y el pitido final del árbitro la certificó.
La prórroga de locos que nos brindaron ambos contendientes no podía empezar sino con una de las pifias del año. El lateral Fran Gámez servía el balón a su portero Parera quien dio una patada al aire y el balón se introdujo lentamente en la portería mallorquinista en el 100'. Sin embargo, el gol no hundió a los pupilos de García Plaza, con hechuras de equipo grande, que en el 114' consiguieron la igualada por mediación de un Abdón matador en el área.
Una tanda de penaltis agónica finalizó con el pase del Fuenlabrada a la siguiente ronda copera tras más de quince penaltis lanzados entre ambos contendientes.