Mourinho y el escapismo en su último día en el Chelsea
El portugués fue despedido con el equipo a un punto del descenso y 'The Athletic' desvela cómo logró esquivar a la prensa que se agolpaba en su espera.
Con el Chelsea en decimosexta posición, a un punto del descenso, con nueve derrotas en 16 partidos y el 17 de diciembre de 2015 terminó la segunda etapa de José Mourinho a cargo de los Blues. Justo después de la destitución del portugués, la prensa se agolpaba a las puertas del Cobham Training Ground, pero no lograron fotografiar a Mou. El de Setúbal salió del campo de entrenamiento por la entrada principal, pero ¿cómo? Al más puro estilo 'El Ilusionista' (2006), como bien nos explica The Athletic.
Como si de un truco de Eisenheim, personaje interpretado por Edward en la célebre película, se tratase, el ya extécnico del Chelsea urdió un plan para escapar de los medios de comunicación y los curiosos. Kevin Campello, nexo de unión de los futbolistas y el club, hizo de señuelo. Campello se puso una sudadera con capucha que le tapaba la cara, además de un reloj caro, y salió de Cobham haciendo creer a los allí presentes que debajo de ese disfraz se encontraba Mourinho.
Sin embargo, el entrenador saldría después, escondido en el maletero de Silvino Louro, uno de sus fieles compañeros y entrenador de porteros. La pareja esperó una media hora para ponerse en marcha, pues, según apunta el medio británico, la prensa persiguió al coche señuelo durante ese tiempo. Cuando no había curiosos, The Special One dejó Cobham finalmente.
De renovar a marcharse
El ahora entrenador del Tottenham, con quienes lidera la Premier League, venía de ganar la tanto la liga como la Copa de la liga, antes conocida como Carling Cup, ahora Carabao. Así como se había hecho con el trofeo a mejor técnico de la temporada 2014-15. Además, había renovado en agosto hasta la temporada 2019. Sin embargo, cuando se esperaba que el equipo despegase definitivamente, los resultados comenzaron a fallar y una derrota contra el Leicester (2-1) el 14 de diciembre de 2015 colmó el vaso de la directiva, que no de la afición.
Las muestras de apoyo a Mourinho se sucedieron los días posteriores a su despido y se pudo ver a muchos hinchas vistiendo camisetas con la cara de José y luciendo banderas proMourinho en el siguiente encuentro liguero ante el Sunderland.
Escapista reincidente
No era la primera vez que el de Setúbal se mimetizaba con Eisenheim. En 2005, en su primera etapa en el Chelsea, se enfrentaban al Bayern de Múnich en la Champions. Mourinho estaba sancionado por haber criticado a la UEFA, por él quiso dar la charla a sus jugadores previa al partido y en el descano. ¿Cómo lo hizo? Llegó por la mediodía al vestuario y esperó allí a sus jugadores, antes de que nadie pudiera percatarse de su presencia. Sin embargo, el escapismo llegó cuando se aproximaba el final del encuentro. Para evitar ser visto, Mou, con la ayuda del utillero del equipo, se escondió en un carro de ropa sucia, el cual utilizó para dejar atrás a la UEFA y poder abandonar el campo sin represalias. "Me estaba muriendo, en serio, lo prometo", reconoció el protagonista en BeIN Sport en 2019.