Los 8 puntos negros del flojo arranque del Deportivo
El Depor ha tenido un pobre inicio de liga en el que se juntan varias carencias, desde la construcción de juego hasta la baja forma de muchos jugadores.
El Deportivo suma cuatro puntos en dos jornadas y se empiezan a encender las alarmas por la pobre imagen mostrada ante Salamanca y Compostela. Algunos problemas vienen desde la pretemporada y otros han aflorado cuando ha llegado el momento de competir de verdad:
Sin creación: Al Deportivo le está costando encontrar un plan de juego y no ha sido capaz de imponer su estilo ante dos rivales con muy diferentes propuestas. No lo consiguió ante un Salamanca que optó por una defensa de cinco y esperar, ni tampoco contra un Compostela que apostó por jugar desde atrás y el fútbol combinativo. En ambos casos, se jugó más a lo que quiso el rival que a lo que pretendía el Deportivo. Y todo pese a que Vázquez sorprendió en los dos partidos con un ataque con Beauvue y un mediapunta como Nacho González en lugar de los dos delanteros con los que probó toda la pretemporada.
Distancia entre líneas: Parte de ese déficit de ideas viene motivado por la distancia de líneas del equipo, tanto cuando ataca como cuando defiende. La presión suele dar réditos tras pérdida, pero no cuando el rival inicia el juego. La distancia entre delanteros y defensas es excesiva, lo que hizo que en los dos partidos los mediocentros rivales (Antas y Molina) jugasen con enorme comodidad y dominasen el juego. Esta carencia, unida a la falta de creación, se traduce en un equipo que crea muy pocas ocasiones de gol, aunque tampoco sufre en exceso en defensa.
Pocas certezas individuales: Después de dos partidos, sobran los dedos de una mano para encontrar a los jugadores que están dando el nivel que se les supone. En defensa están funcionando Mujaid y Granero, tanto como una pareja de centrales coordinada como en su rendimiento individual. El tercer futbolista que está dando altura es Keko. El extremo madrileño es el jugador que tiene las ideas más claras en ataque, tanto que se está convirtiendo casi en el único recurso. También destacaron Borja Galán y Gandoy en su papel de revulsivos ante el Salamanca, pero no tuvieron minutos contra el Compos.
La exigencia del favorito: La plantilla del Deportivo es, de largo, la más cara de Segunda B. Doce jugadores blanquiazules tienen un pasado bastante reciente en Primera y las expectativas desde el principio de temporada exigían un equipo dominante. La necesidad de ganar y además hacerlo de forma solvente, está pesando. Al equipo se le ve con excesiva ansiedad en muchas fases de los encuentros, tanto en lo colectivo como en lo individual.
La posición de Bergantiños: El capitán blanquiazul ha sido elegido por Vázquez esta temporada como el encargado de iniciar el juego. Álex no está cómodo en ese puesto y eso se traduce en que la construcción se atasca desde su inicio, con Borges y Nacho González demasiado lejos y sin ofrecer alternativas ni soluciones. Tanto ante Salamanca como Compostela el rendimiento del equipo, y del propio Álex, mejoró notablemente cuando entró Uche y el capitán adelantó su posición.
Baja forma: Dentro del mal rendimiento colectivo está sorprendiendo la falta de ritmo y velocidad de algunos jugadores. Borges, llamado a liderar el equipo, está muy lejos de su mejor forma física y lo acaba pagando con flojísimas actuaciones. A Miku, fichado como jugador en paro, le está costando coger la forma. Puede aportar mucho, pero necesita llegar a un punto óptimo de preparación. Lara, que en la pretemporada volaba, ha perdido chispa y ahora le cuesta desbordar rivales, su principal virtud. A Uche también le falta bastante, aunque su caso es diferente ya que viene de una larga lesión de rodilla.
Fallos de planificación: Hay algunos casos en este verano que son difíciles de comprender. El primero fue el de Borges. El Depor anunció su fichaje, cerrado bastante antes, el 6 de septiembre, pero el costarricense no llegó a Abegondo hasta el día 25. Uche, que no llegó a marcharse de A Coruña pese a la incertidumbre con su futuro para recuperarse, paró durante tres semanas para ir a negociar a Bélgica su salida del Standard de Lieja. El caso de Rolan es todavía más sangrante. No pisó A Coruña en todo el verano, estuvo sin entrenarse y ahora está en Uruguay tramitando el permiso de trabajo mientras el Deportivo ya ha jugado dos partidos.
Caso Fuenlabrada y pretemporada: El Deportivo apuró hasta el final su pelea por evitar el descenso tras todo lo sucedido por el Caso Fuenlabrada. Esa lucha en los despachos también afectó a la llegada de los fichajes, que no empezaron a viajar a A Coruña hasta el movimiento del CSD y el sorteo del calendario. La pretemporada ha sido larga, ya que la liga no arrancó hasta el 18 de octubre. Con todo, el equipo sólo jugó cinco partidos de preparación. De ellos tres fueron ante rivales de Tercera (Racing Villalbés, Arzúa y Bergantiños) y dos frente a equipos de Segunda B (Pontevedra y Valladolid B).