Borja Galán, de la nada al todo en solo 27 minutos
El extreno madrileño, inédito en la pretemporada, se estrenó en el minuto 71 ante el Salamanca y revolucionó a un Depor que ganó en el último segundo.
El Deportivo comprobó este domingo que el camino para retornar a Segunda será realmente duro. Los coruñeses estuvieron planos en el primer tiempo ante el Salamanca y se volvieron a atascar tras el empate de Candelas (1-1) en el minuto 66. El héroe fue Bóveda con su gol en el 97’, pero el jugador que despertó al equipo fue Borja Galán. El madrileño se pasó toda la pretemporada en blanco por las lesiones y no disputó ni un minuto en los amistosos de verano. Sin rodaje, su estreno fue ante el Salamanca, en una actuación presidida por el descaro y la eficacia en el uno contra uno en la mayoría de los lances. El extremo fue un incordio para la defensa charra y una alegría para Vázquez, que ve como se amplían sus posibilidades en unas bandas que parecían cerradas a Keko y Lara.
Galán, que recientemente renovó por dos temporadas, empieza con buen pie su segundo intento de hacerse un hueco en el Depor. Fichado para el Fabril en la temporada 2017-18, su debut en Segunda se produjo la temporada siguiente en las filas del Alcorcón, donde fue cedido tras la petición de un Cristóbal Parralo que lo había entrenado en el filial coruñés. La pasada campaña retornó al conjunto blanquiazul, pero no logró asentarse ni con Anquela, ni con Luis César ni con el propio Fernando Vázquez, que dio luz verde a una nueva cesión en enero. Esta vez su destino fue el Racing, pero su mentor no varió. Cristóbal Parralo fue quién lo reclamó, pero al poco tiempo fue cesado y Borja perdió protagonismo en el conjunto cántabro.
La fluidez de Gandoy
Otra buena noticia para el Depor fue la actuación de Yago Gandoy. El canterano debutó también en el minuto 71 entrando al partido junto a Borja Galán y Uche Agbo. Con él en el campo mejoró la fluidez en la circulación de balón, muy atascada con el trío formado por Bergantiños, Borges y Nacho González. Al poco de entrar dio un magistral pase a un desmarque al espacio de Bóveda y en el último minuto volvió a encontrar al lateral vasco, esta vez para darle la asistencia del 2-1. Con su actuación el jugador coruñés gana enteros para convertirse en una alternativa real al centro del campo blanquiazul.