El limbo de Milik en el Nápoles
Tras ser el máximo goleador del equipo, el delantero polaco no ha sido inscrito por los 'partenopei' en competición alguna. "Sufriré y resistiré", asume.
Arkadiusz Milik (Polonia, 28 de febrero de 1994) se ha quedado fuera de las listas de Gennaro Gattuso, tanto la doméstica como la europea. La grada será el hogar del internacional polaco. El pasado año era el delantero titular del equipo, hace poco era uno de los arietes más cotizados de la Serie A y la Juventus, el Atleti o el Tottenham han llamado a la puerta de Di Laurentiis en algún momento para interesarse por su situación. Lo tuvo hecho con la Roma, pero el acuerdo se truncó al no salir Dzeko en dirección Turín. De estrella cotizada a descartado. Un giro de los acontecimientos que nadie, nuestro protagonista incluido, esperaba.
"El club no me ha tratado bien", se lamenta el de Tychy en declaraciones a 'Sportowefakty.pl'. En el medio de su país explica las razones de su caída en desgracia. "El Nápoles quería renovarme y me dio un ultimátum: o firmar o sales. Decidí probar suerte fuera. Mi agente buscó una solución, aparecieron varios equipos interesados y nos sentamos a hablar", explica. "La pandemia complicó las cosas, al igual que para otros jugadores... No diré los nombres de los equipos que me contactaron, pero es cierto que acepté algunas propuestas", reconoce.
Sin embargo, si las negociaciones no llegaron a buen puerto no fue por la falta de interés del atacante polaco. "Los equipos en cuestión nunca consiguieron llegar a un acuerdo con el Nápoles, así que tuve que quedarme". Resignado, su mayor decepción llegó al conocer que no estaba inscrito en la Serie A y en la Europa League por terceros: "Fue difícil enterarse de esto por la prensa. Lo esperaba, pero esta falta de comunicación es muy poco profesional", señala.
Sufrir y resistir
No obstante, a pesar de lo complicado de la situación ("hay otros jugadores que no han renovado, pero en su caso no hubo problemas"), no se rinde: "He sido el goleador del equipo las dos últimas campañas, siempre he estado al cien por cien. No me arrepiento de lo que hice o decidí. Sufriré un poco, pero resistiré", finaliza un Milik cuya vida futbolística ha dado un giro de 180 grados.
En los 35 partidos que disputó el pasado año, marcó 14 tantos, mientras que en la 2018-19 firmó 20 dianas, 17 de ellas en los 35 encuentros que jugó en la Serie A. Números que le colocaban entre los goleadores más destacados del campeonato italiano. Sin embargo, el fichaje de Victor Osimhen este verano le cerraba la puerta a la titularidad y, según parece, ahora se le ha cerrado también la de los minutos. Como él mismo reconoce, le toca sufrir y resistir mientras permanezca en su limbo particular.