LIGA DE NACIONES | UCRANIA - ESPAÑA
El público también juega en Kiev
Ucrania contará esta tarde con el apoyo de unos 15.000 aficionados en las gradas. La Selección regresa al estadio en el que ganó la Eurocopa de 2012.
Si hablamos de Kiev y hablamos de fútbol, es inevitable que la memoria nos lleve a 2012. Al pensar en ello se me viene a la cabeza una canción de Sabina en la que el de Úbeda, parafraseando al poeta Félix Grande, dice: "Al lugar donde has sido feliz, no debieras tratar de volver". Pero allí vuelve España, a Kiev, donde fue feliz y vivió su último gran éxito con el 4-0 a Italia en la final de la Eurocopa disputada hace ahora ocho años. Inolvidable. No sé si eso también era vivir por encima de nuestras posibilidades, pero fue gozoso.
España y Ucrania se reencuentran en esta fase de grupos de la Nations League y mucho han cambiado las cosas desde el duelo disputado hace tan sólo un mes en Madrid (sigue el partido en directo en As.com). Entonces se avecinaba un rival incómodo que finalmente terminó perdiendo por 4-0 y que desde entonces ha saldado sus tres partidos disputados con otras tantas derrotas. En la víspera de aquel encuentro se hablaba de Ansu Fati (el azulgrana venía de debutar con La Roja frente a Alemania en el estreno de la Nations League), pero no tanto como después del choque, pues fue él quien se encargó de echar la puerta abajo al forzar el penalti que dio lugar al primer gol en el minuto 2 y al firmar el 3-0 con el que entraba en los libros de historia al convertirse en el jugador más joven de la Selección (entonces tenía 17 años y 311 días) en marcar desde que lo hiciera Juan Errazquin en 1925 (ante Suiza, con 18 años y 344 días).
Pero hay otro aspecto notable que diferencia aquel encuentro de Valdebebas del que hoy se disputa en el Estadio Olímpico de Kiev: el público. La selección ucraniana disfrutará esta noche del apoyo de sus aficionados (se calcula que en torno a 15.000 estarán en las gradas), algo que a Luis Enrique no le quita el sueño. El asturiano prefiere ver el vaso medio lleno en lugar de medio vacío: "Jugar con espectadores es algo optimista porque parece que podemos encontrar la normalidad. Ya les diré a los jugadores que piensen que nos animan a nosotros".
Respecto al posible once titular, el seleccionador guardó sus cartas en la conferencia de prensa de ayer, lo que es lógico para no dar pistas a Andriy Shevchenko. De Gea volverá a estar bajo palos y todo apunta a que Pau Torres vuelva a ser el socio en el centro de la defensa de Ramos, de quien no nos extrañemos si se le escapa hoy una sonrisa en cuanto pise el césped. Allí fue titular en el mencionado 4-0 ante Italia de 2012 (Busquets y Navas son los otros dos jugadores que junto al de Camas se mantienen de aquella Selección campeona de Europa), también en la final de la Champions 2018 disputada frente al Liverpool, aquella de su roce con Salah y el acrobático gol de Bale. Es probable que Rodri ejerza de timón tras los dos partidos consecutivos jugados por Busquets, mientras que Rodrigo Moreno podría volver a tener la oportunidad de formar en ataque. Gerard Moreno y Diego Llorente se quedaron finalmente en Madrid debido a sus problemas musculares.
Enfrente, Shevchenko busca sillas y mesas por Kiev en las que poder tocar madera ante la mala suerte que le persigue en los últimos días. La COVID-19 dejó KO a su portero titular, el veterano Pyatov, y a su medio centro de referencia, Stepanenko. El ex Balón de Oro tampoco puede contar con otros dos de sus porteros, Pankov y Lunin, así que el honor patrio queda en los guantes de Bushchan, quien viene de encajar siete goles en el amistoso con Francia (7-1) y de protagonizar una pifia el sábado contra Alemania (1-2) que deja a nuestro rival de esta noche penúltimo del Grupo 4. Malinovskiy y Zinchenko también están descartados para enfrentarse a una Selección española de la que Shevchenko afirma que "no te da facilidades para hacer lo que quieres". En eso consiste el fútbol, en jugar y que no te jueguen. Y en que el público vibre en las gradas. Lo de hoy es un nuevo paso hacia el fútbol de verdad.