El Real Madrid se pone a 100 con los traspasos de canteranos
Con los 4,2 millones que ingresa por el traspaso de Llorente al Leeds y el medio millón de la venta de Javi Hernández al Leganés, suma 100,2M€ este verano.
El Real Madrid suma y sigue dentro de su verano atípico, marcado por la crisis sanitaria del coronavirus y sus consecuencias económicas para el mundo del fútbol; la ausencia de aficionados en los estadios ha eliminado la partida de ingresos por abonos y taquilla, lo que en el Madrid supone una caída de más de 150 millones de euros por temporada. Circunstancias complicadas que han llevado al club a una táctica conservadora durante este mercado de fichajes: cero incorporaciones y todas las ventas posibles, con la cantera como principal motor del plan. Y, de momento, el plan funciona y el motor también: ya se ha puesto a más de 100.
En concreto, el Real Madrid ha ingresado (o ingresará, cuando llegue el momento de los pagos) 100,2 millones de euros en transferencias de jugadores criados en la cantera de Valdebebas. La penúltima operación ni siquiera ha sido obra del club blanco, sino que ha contado con la Real Sociedad y el Leeds United como cooperadores necesarios: el defensor Diego Llorente, fruto de La Fábrica, fue traspasado a la Real Sociedad en el verano de 2017 a cambio de seis millones de euros, aunque el Madrid se guardó un as bajo la manga en forma de 30% de una futura plusvalía si el futbolista era traspasado a un tercero; ahora, el Leeds pagará 20 millones de euros por Llorente, lo que arroja un beneficio neto de 14 millones de euros, de los cuales el Madrid se llevará 4,2.
A eso se añade la venta del 50% de los derechos de Javi Hernández al Leganés por medio millón: antes llegaron las operaciones de Achraf al Inter, por 40 millones (hay otros cinco por objetivos, pero de muy difícil cumplimiento); Reguilón al Tottenham, por 30 (otros 5 en variables); Óscar al Sevilla, por 15 millones (el Madrid se queda el 25% de sus derechos); y cuatro castillistas que han permitido ingresar 10,5 millones de euros a cambio del 50% de sus pases, lo que anticipa más dinero en el futuro si sus carreras siguen progresando. Son Javi Sánchez al Valladolid (3 milones), Baeza al Celta (3) y Dani Gómez (2,5) y De Frutos (2,5) al Levante. Con los 4,2 que aporta ahora la venta de Diego Llorente y el medio millón de Hernández, la cantera blanca ya ha generado 100,2 millones de euros en este mercado. Y todavía no ha terminado; hasta el 5 de octubre, hay tiempo para que la cuenta suba aún más.
La plantilla del Real Madrid consta ahora mismo de 25 jugadores, con tres de ellos sin sitio asegurado; casualmente, son tres de los cuatro delanteros: Jovic, Mayoral y Mariano. El Real Madrid está estudiando la opción de ceder al serbio para que pueda jugar con regularidad y recuperar su mejor nivel, ese que le llevó a ser fichado desde el Eintracht de Frankfurt a cambio de 60 millones de euros. Pero la operación no avanza de momento y, si finalmente se queda, sería Mayoral quien debería salir para garantizarse continuidad. Ha tenido varias ofertas de Italia y el Valencia también se ha interesado, pero sigue a la expectativa de lo que pueda pasar con Jovic. El caso de Mariano es independiente: el Madrid quiere traspasarlo o cederlo, pero el jugador se niega; ya rechazó el interés del Benfica este verano. Si finalmente generan algún ingreso con sus salidas, Mayoral y Mariano aumentarían esa cuenta que ya roza los 100 millones de euros gracias al traspaso del producto de Valdebebas.
Caída de ingresos de 150 millones
Estos enormes ingresos a cambio del traspaso de canteranos están siendo el bote salvavidas del Real Madrid en esta situación tan delicada. En las cuentas de la temporada 2018-19 (las de la 2019-20 no son públicas aún), los ingresos por taquilla y competiciones fueron de 205,7 millones y los procedentes del pago de abonos y cuotas de socio, de 54,3 millones. En total, 260 millones de los que hay que restar las cantidades ingresadas en concepto de premios por competición.
En la Champions, la principal fuente de esta partida, supusieron 85 millones de euros, lo que sumado a Liga, Copa, Supercopa de Europa y Mundial de Clubes (los torneos que se jugaron aquel curso) supuso más de 100 millones para las arcas blancas; el resto, por encima de 150 millones, fue dinero obtenido por taquilla, abonos y cuotas de socio, dinero que en su mayor parte (sólo se están cobrando las cuotas) no está entrando ahora en el Madrid, obligándole a este verano de cero fichajes y muchas ventas, con La Fábrica tirando del carro.