Lekue despierta intereses

El nombre de Iñigo Lekue, como en los dos últimos veranos, ha estado ligado a proposiciones de clubes de fuera de Euskadi que solicitaron su cesión. No obstante, el lateral derecho deustoarra siempre ha mantenido el tipo y superado el corte tanto de los técnicos, tanto con Ziganda como con Berizzo. Con Gaizka Garitano no supone una excepción.

Estas últimas semanas, el Athletic y su agente han recibido intereses de varios clubes que han preguntado por su situación, entre ellos de un Elche recién ascendido a Primera. Precisamente en el Martínez Valero se han fogueado en las últimas campañas Etxeita, Andoni López y el amago de Unai Simón. La respuesta es la misma, el míster deriotarra cuenta con la polivalencia de Lekue, y más con la lesión de Ibai Gómez y la salida inminente de Gaizka Larrazabal en busca de oportunidades.

Iñigo Lekue estaba encontrando sensaciones en el verde de Lezama tras el confinamiento antes de un último contratiempo en el tobillo izquierdo el pasado mes de mayo le laminara, un palo más en las ruedas de un jugador del gusto de Gaizka Garitano. Una pieza de la plantilla que le ofrece honradez, regularidad, calidad técnica, descaro y que le resuelve cubrir varios puestos ya que puede actuar en las cuatro esquinas del campo. Salvo volantazo inesperado, no saldrá cedido. El canterano rojiblanco y del Danok Bat tiene contrato hasta junio de 2023. Ante el Granada fue convocado, aunque no saltó al verde.

El mal fario con las lesiones se han cebando con Iñigo Lekue en las dos últimas campañas, lo que le ha impedido gozar de mayor continuidad. Además de ese último esguince de tobillo izquierdo, que le restó minutos en el tramo final de la interrupida última campaña, el carrilero deustoarra encadenó hasta dos lesiones de consideración el accidentado pasado curso: una fractura en el maleolo peroneo derecho, en agosto, y una segunda avería en forma de discotapía lumbar, en diciembre.