Caos en la Serie A: "El campeonato ya está falseado"

Italia consiguió añadir al miedo al coronavirus y las inevitables medidas para limitar el contagio, un desastre organizativo del campeonato de Serie A, cuya credibilidad, para muchos, está en el alambre. Hace una semana por la emergencia se decidió aplazar cuatro partidos: Verona-Cagliari, Torino-Parma (que se jugarán el 11 de marzo), Atalanta-Sassuolo e Inter-Sampdoria, que de momento no tienen fecha. Los de Bérgamo dependerán de su periplo en la Champions League, mientras que los milaneses, en el hipotético caso en el que llegasen a las finales de Copa italiana y Europa League, no tendrían espacios libres para recuperar el enfrentamiento.

Debido al calendario tan ajetreado de los próximos meses, la Serie A había decidido el pasado jueves no aplazar más partidos en las zonas con más contagios: Juventus-Inter, Milán-Genoa, Parma-Spal, Sassuolo-Brescia y Udinese-Fiorentina de este fin de semana, se habrían disputado a puerta cerrada.

Una decisión dolorosa, sobre todo considerando la horrible imagen que habría dejado un derbi de Italia decisivo por el scudetto sin público, pero inevitable. Sorpresivamente, no obstante, ayer cambió todo: la Serie A aplazó los cinco partidos al 13 de mayo, trasladando la final de Copa italiana al día 20 (cuando el Olímpico de Roma ya estará ocupado por la UEFA con vistas a la Eurocopa: se jugará en San Siro).

Una medida que no le gustó casi a nadie. La mejor lucha por el scudetto de los últimos 20 años ya se ha complicado: la Lazio ahora es líder con dos puntos sobre la Juve, que tiene un partido menos, y ocho sobre el Inter, que debe recuperar dos (uno de los cuales todavía sin fecha). La situación de los nerazzurri no es nada sencilla y sus hinchas protestaron en los alrededores de la sede de la Lega Serie A, mostrando varias pancartas que recordaban el Moggigate (“Vergüenza”, “vuelve Calciopoli”), y también la directiva se mostró muy molesta.

El consejero delegado Marotta habló de "campeonato falseado", añadiendo que el club "se siente perjudicado por una decisión imprudente tomada sin una asamblea con todos los equipos". El técnico del Nápoles, Gennaro Gattuso, expresó las mismas dudas: “O se juegan todos los partidos, o el campeonato se para. No es lo mismo jugar hoy o el 13 de mayo. Así no me gusta”. El entrenador del Lecce, Fabio Liverani, fue más tajante: "Vuelve el lado oscuro del fútbol que tanto nos costó limpiar. Esta decisión solo defiende cuatro-cinco equipos y sus intereses. No tiene sentido".

No queda claro lo que ocurrirá en los próximos días. El Juve-Milán de Copa italiana, por ejemplo, podría jugarse a puertas abiertas, dejando fuera a los habitantes de Lombardía, Véneto y Emilia Romagna. Pero la gran duda es qué se hará si las autoridades dejan cerrados los estadios. Seguir aplazando es imposible, aunque jugar a puerta cerrada aumentaría las polémicas y las dudas por todo lo ocurrido con este Juve-Inter.