"Tuve un clic ante el Galatasaray"
Courtois aseguró en Proximus Sport que el partido del Madrid en Turquía fue un punto de inflexión en su temporada: "Tuve la sensación de que nadie me superaba...".
En siete meses de competición, Thibaut Courtois ha transitado por todos los estados de ánimo. De la inseguridad de comienzos de temporada alimentada por la estadística (nueve goles encajados en los cinco primeros partidos) y por la sombra de Keylor Navas, portero de las tres Champions seguidas traspasado al PSG, pasó a la frustración al sentirse señalado tras la goleada del PSG (3-0) y pitado en el Bernabéu contra el Brujas (encajó dos goles y se quedó en el vestuario en el descanso por unas molestias estomacales). Después, renació con paradas de mérito y porterías a cero, ejerciendo de héroe contra el Valencia (cabeceó en el descuento un córner que abrió el camino para el empate a uno de Benzema) y en la Supercopa de España (fantástico durante la final contra el Atleti, le paró un penalti a Thomas en la tanda y le dio el título al Madrid). Y cuando estaba en plenitud física, psicológica y con una hoja de servicios sobresaliente, contra el Levante volvieron las dudas en el gol de Morales, donde se le vio inexplicablemente encoger los brazos.
Para Courtois, el punto de inflexión de su temporada se produjo el 22 de octubre en Estambul, cuando el Madrid ganó al Galatasaray (0-1). Antes de ese encuentro, se sintió en la diana tras el naufragio del Madrid en Mallorca (1-0), en aquel partido contra el Brujas donde no jugó el segundo tiempo por una indisposición (2-2) y en la debacle de París (3-0). Además, en el resto de partidos no ofreció esa imagen de ‘portero milagro’ tan del Real Madrid. Pero en el Ali Sami Yen, Courtois se vino arriba. "Contra el Brujas logramos un punto que fue clave para clasificarnos. Pero contra el Galatasaray me vino un ‘clic’. De repente tuve esa sensación de que nadie me superaba. Después, Roberto Martínez, el seleccionador, me dijo: ‘Allí he vuelto a ver al Thibaut del Mundial", señaló el guardameta del Real Madrid en unas declaraciones en Proximus Sport. Aquella noche en Turquía detuvo todos los remates a puerta que le llegaron y lanzó un mensaje fuera del campo: "Sé el portero que soy y nunca dudé de mí mismo. Sé dónde estoy y a mí solamente me interesan las críticas constructivas".
Después del encuentro en Turquía, Courtois sólo encajó 10 goles en 19 partidos (0,5) y registró once ‘porterías a cero’. Contrasta con los 12 tantos en nueve choques que preceden a la cita contra el Galatasaray (1,3) y sólo en dos ocasiones imbatido. El belga fue uno de los pilares de esa racha de 21 partidos sin perder que tuvo el Madrid. “Lo importante para mí es no mostrar dudas; así tampoco agitaré a mi defensa”, manifestó. Unas dudas que parecen haber vuelto en los dos últimos partidos, donde los de Zidane han perdido cinco puntos (2-2 contra el Celta y derrota 1-0 ante el Levante), en el momento menos oportuno de la temporada.