El Almería despide un 2019 donde empezó 'pobre' y se volvió 'rico'
El empresario agrícola Alfonso García vendió la totalidad de sus acciones al ministro saudí Turki Al-Sheikh, pasando el ascenso de tabú a ser una obligación.
El futuro llegó al Almería en 2019, año histórico para la entidad rojiblanca a pesar de no protagonizar ningún ascenso o descenso. El 2 de agosto Turki Al-Sheikh compró la totalidad del paquete accionarial de Alfonso García (el 96%, aunque ya tiene prácticamente el 100%), convirtiéndose en el nuevo dueño y presidente de la UDA, virando de un día para otro e inopinadamente: un empresario agrícola por un ministro saudí. Alfonso García, que se hizo con las riendas del Almería en 2003 logró su deseo de vender el club, algo que llevaba pregonando de manera pública en los últimos años por no tener la ilusión de antaño. No en vano, los rojiblancos tenían hace 365 días el objetivo de no pasar apuros y lograr el objetivo de salvarse antes de la última fecha (tres cursos consecutivos con la permanencia en la jornada 42); ahora, el ascenso no es una utopía ni un sueño, sino una obligación.
Para ello Turki Al-Sheikh no ha escatimado a la hora de hacer fichajes, aunque en el fútbol -y más en Segunda División, con el dinero no basta. En verano se gastó más de 15 millones de euros, destacando los casi nueve en Arvin Appiah, el fichaje más caro de los 30 años de historia del club; además, despachó a todos las incorporaciones que había realizado la anterior dirección deportiva este mismo verano. Los movimientos no quedan ahí, puesto que en la ventana que se abre esta semana habrá en torno a una decena de movimientos, entre salidas y entradas, a pesar de que el equipo marcha en segunda posición.
Una segunda posición en la que dejó el equipo Pedro Emanuel. El técnico angoleño sustituyó a Óscar Fernández con la llegada del jeque (el valenciano no llegó a debutar tras firmar en junio) y fue fulminado la noche del 4 de noviembre, en pleno debate electoral. España miró al sudeste, ya que su sustituto no era cualquiera, sino Guti, en su primera aventura en solitario el fútbol profesional. Poco después del aterrizaje del ex del Real Madrid, quien se vio previamente en Riad con Al-Sheikh como otros múltiples entrenadores de prestigio (Mourinho, Setién...), llegó José María Gutiérrez, ya que el de Torrejón de Ardoz pidió nueva denominación.
Otro de los nombres del 2019 rojiblanco fue el de Fran Fernández, quien cumplió con nota en su primera aventura completa al frente del primer equipo almeriense. El técnico de la casa tuvo a los rojiblancos todo el curso en la zona media-alta de la tabla, aunque no logró a dar el esprint suficiente para colarse en promoción. Fue el séptimo mejor equipo de la categoría de plata desde enero hasta final de curso, con nueve victorias y ocho empates en 23 partidos, pero los 60 puntos no le dieron para meterse en un sexto puesto que costó 68 unidades. El zapillero no renovó contra todo pronóstico, firmando semanas después por el Alcorcón. También sonó fuerte el nombre de Álvaro Giménez, que se consagró en Almería con sus 20 dianas que le valieron un Pichichi y un contrato con el Birmingham.
Del término 'ascenso' como algo tabú para una entidad que había vivido en Primera División en seis de las ocho temporadas entre 2007 y 2015 se pasó a una obligación para un Turki Al-Sheikh que quiere sus objetivos cuanto antes. Así se entiende el cambio de José María Gutiérrez por Pedro Emanuel, además del plano mediático que tanto le gusta al nuevo dueño de la UDA. El ex del Real Madrid marcha por buena senda, habiendo ganado tres encuentros ligueros, empatando otros tantos y claudicando sólo en el último del año, frente a la Ponferradina.
Nuevas miras del Almería.
En la presentación del nuevo proyecto, el director general y la cara visible del jeque, Mohamed El Assy, anunció que pretendían mejorar en tres pilares: al deportivo había que sumarle el de infraestructuras y el social. En el caso del último, durante este 2019 Al-Sheikh organizó un concierto con famosos músicos, además de la habitual tarea que realiza la Fundación UDA. En el plano de infraestructuras, los saudíes se han propuesto construir la ansiada Ciudad Deportiva en La Vega de Acá, lunar en los tres lustros de Alfonso García, además de remozar el Estadio de los Juegos Mediterráneos. Todo ello sin límites: el nuevo presupuesto es de 20 millones de euros (prácticamente el doble que el anterior), con 18 kilos de límite salarial. Y el objetivo no basta con subir a Primera División para un Almería que quiere hacerse grande a los ojos de unos aficionados con mezcla de ilusión y miedo.