El cónclave que decidirá el futuro a corto plazo del Valencia

La continuidad de Mateu Alemany como director general del Valencia es todavía una incógnita. El mandatario, junto a Anil Murthy, se encuentra en estos momentos en Singapur resolviendo su futuro con Peter Lim quien, como siempre, tendrá la última palabra para decidir si sigue contando o no con el mallorquín, uno de los principales artífices de que el Valencia haya vuelto a ser campeón once años después.

Pero para llegar al cenit del proyecto, que fue ganar la Copa del Rey el mismo año que el equipo se clasificaba por segunda temporada consecutiva para Champions, Alemany ha tenido que llevar a cabo una elevada cantidad de operaciones de mercado en los dos años y medio que lleva en la entidad ché. Desde la limpieza del vestuario en 2017 hasta el verano actual en el que, en teoría, se pretendía apuntalar la calidad de la plantilla, ha realizado un total de 43 operaciones.

El primer fichaje de la 'era Alemany' no fue otro que Marcelino. El asturiano fue una apuesta personal del director, opuestamente a lo que quería Alexanco quien apostaba por Quique Setién. A partir de ahí director y entrenador trabajaron como un tándem para llevar a cabo uno de los veranos con más movimientos en la historia del club.

Después de haber clasificado como decimosegundo y con un ambiente más que enrarecido en la plantilla, en el mercado estival de 2017 la entidad ché comandada por Mateu Alemany llevó a cabo un total de doce salidas, algunas tan ruinosas como las de Diego Alves o Nani, que apenas dejaron dinero en las arcas valencianistas. Eso sí, ese mismo verano el proyecto, que ahora agoniza, arrancó, y lo hizo con el fichaje de siete futbolistas, entre ellos estaban piedras angulares como Kondogbia, Guedes o Paulista. Ese invierno se sumaría Coquelin.

La maestría con la que Alemany ha gestionado desde su llegada las operaciones le ha servido al club para poder incorporar fichajes pese a no tener liquidez en determinados momentos. Sin ir más lejos, fichó a Kondogbia en el verano de 2017. No obstante no firmó su traspaso, pues hasta entonces estaba cedido, hasta el verano de 2018. Por el fichaje de Guedes, quien se oficializó como valencianista a todos los efectos el pasado verano, el Valencia todavía no ha depositado un solo euro.

Longoria paraliza la actividad con los agentes

Además de cuadrar números, desde la llegada del mallorquín y la posterior incorporación de Longoria, también se ha agregado un nuevo tipo de operación: fichar talento joven que con los años se revalorice pese a que apenas juegue en el club. Este verano, el plan era dar un paso más. Con la revalorización que había vivido la plantilla, Alemany pretendía sumar jugadores con mayor calidad y para evitar gastar excesivos millones, incluir jugadores del propio equipo. Así lo hizo con Cillessen y Neto y también con Maxi Gómez y Santi Mina. Ahora, el director del área deportiva ha paralizado toda actividad con los agentes de cara a cerrar nuevas operaciones. La dirección deportiva está parada.