"Es un sueño para mí poder dejar huella en el Espanyol"

Matías Vargas destila ilusión. Su predisposición por vestir la camiseta del Espanyol ha sido clave para acabar firmando. Ha sido el fichaje más caro de la historia del club perico, 10,5 millones de euros (Vélez Sarsfield se ha reservado un 20 por ciento de una futura venta), y mostró su pasión al comentar que “es un sueño para mí poder dejar huella en el Espanyol. Tengo mucha fe y confianza de que esta apuesta va a funcionar en mi caso. Confío mucho en mí y en la ayuda que me va a aportar la gente del club para crecer juntos”.

El director de fútbol profesional del Espanyol, Rufete, se congratuló por cerrar el fichaje de Vargas y expuso que “es uno de esos jugadores que nos puede ayudar a unir la parte de atrás con la de ataque. La operación es buena. Confiamos mucho en la edad, capacidades y cualidades de Matías. Pondremos todo de nuestra parte para que se integre en el fútbol español. Es una pieza importante para seguir creciendo y lograr objetivos como club”.

Las conversaciones entre Rufete y Vargas han sido constantes para cerrar su incorporación a la entidad perica y es que “me comentó el proyecto de crecimiento que tiene este club, las ideas de juego y lo que quieren para mí. Me demostraron interés y también me interesé mucho. Elegí el Espanyol porque, sinceramente, me parece un club muy grande. Sentí mucho venir a este lugar, era lo que deseaba y cuando me contaron del proyecto que tiene el Espanyol solo me quise sumar y aportar mi granito”.

Habló con Heinze antes de aceptar la oferta perica y “me contó un poco lo que es Europa y esto es realmente la elite del mundo del fútbol, lo mejor está aquí. Me dijo que me iba a encontrar algo más duro, pero que estaba capacitado para hacerlo”. Vargas ha trabajado durante dos días con sus nuevos compañeros en Torremirona y “la sensación es muy buena. Hay un fantástico grupo, muy humano, me trataron muy bien. Muy contento y agradecido a todos mis compañeros”.

El Espanyol ha hecho una gran apuesta por él y no le asusta porque “siempre tuve claro venir, por más que hubiera interés de otros clubes, nunca lo dudé y así lo comuniqué a Vélez. Ser el fichaje más caro del club es una responsabilidad, obviamente. Es algo muy lindo, pero tendré que demostrar en la cancha porqué pagaron esto”. Este curso por fin dará el salto a Europa. Ofertas para hacerlo antes no le han faltado, pero “antes tampoco tuve ofertas de las principales ligas de Europa y mi objetivo siempre estuvo en jugar en la Liga española o en las principales. Me manejo por sentimiento y antes quizás no sentí moverme del club en el que estaba. Ahora sí lo sentí por este”.

Jugar en el Espanyol ya es para Vargas bastante importante. Por ello, fue claro a la hora de hablar de si el hecho de tener la posibilidad de disputar la Europa League fue algo que le hizo decantarse aún más por venir: “Sinceramente, si no hubiera habido competición europea habría venido igual”. Su posición natural es la de extremo zurdo, pero “también puede jugar por la derecha. Tengo mis cualidades y ser el nexo entre el medio del campo y los delanteros es una de las virtudes. Y crear desequilibrio. También siento que tengo sacrificio y trabajo defensivo, que es algo que pide Gallego a todos”.

Su ilusión sería poder debutar ya en partido oficial con el Espanyol el día 25, en la Europa League, pero aún existen dudas de si habrá llegado el tránsfer.

Asimismo, fue preguntado por las diferencias que puede haber entre el fútbol español y el argentino. Y en una conversación que mantuvo recientemente con su padre dio la clave: “En Argentina estás todo el día chocando y aquí quizás no he chocado con nadie. Era raro, no recibí patadas ni nada. Se marca mucho mejor en cuanto al mano a mano. En el tema del roce, en el fútbol argentino no pitan casi nada los árbitros. Se genera mucha fricción en el juego”. ¿Volver a la selección? “Sería algo muy lindo que pueda volver a estar en alguna convocatoria de la selección. Son otros objetivos que se dan para esta temporada”, concluyó.