Cinco conclusiones que deja Brasil al clasificar a cuartos

Brasil cumplió con la tendencia y clasificó a cuartos de final sin recibir goles en contra y líder de su grupo. La selección que arrancó con un 3-0 ante Bolivia que no dejó satisfecha a la hinchada, una ‘torcida’ que terminó en los dos primeros partidos silbando a su equipo e inconforme por la falta de gol. Sin embargo, desde adentro del equipo nunca se perdió la confianza y en el último partido de la fase de grupos ante Perú, volvió a aparecer el Brasil que le gusta a la gente, con goles, buen juego y personalidad.

Tite no teme a los cambios

"Aprendí que hay que renovarse pronto", con esa frase Tite sintetizó su forma de jugar un torneo corto como la Copa América. Si bien su esquema hasta la mitad de la cancha está definido con la línea de cuatro, el volante de marca y el de generación. Le costó encontrar la combinación ofensiva que le diera el gol que le hacía falta y lo logró a partir de los cambios en la nómina.

El técnico entendió que no se puede ser terco cuando los jugadores no logran demostrar sus condiciones en la cancha en 90’. De los nueve cambios que hizo en los tres partidos, seis fueron en posiciones de ataque, sin contar los que hizo en el XI titular ante Perú, donde dejó en el banco a Neres y Richarlison para darle paso a Gabriel Jesús y Everton.

Everton y Coutinho, las claves del gol

Con dos anotaciones cada uno, son los goleadores de Brasil en esta Copa América. El 50% de los goles que marcó el pentacampeón en esta fase (8) fueron obra del jugador de Gremio y del de Barcelona. Sin contar que también aportan una asistencia cada uno.

Uno de los principios del fútbol es el juego colectivo y con los dos jugadores en la cancha, Brasil logró encontrar esa sociedad de la que careció en los primeros partidos. La velocidad y gambeta de Everton, junto a la facilidad para filtrar balones de Coutinho, generan mucho peligro para las defensas rivales. Hay mayor empatía en la cancha entre los dos que quizá con el del Barcelona y Neres.

Laterales más versátiles

Filipe Luis y Dani Alves son claves en la forma como ataca Brasil. Aunque se nota más por el sector derecho con el lateral -que anunció su salida del PSG- y busca asociarse con Coutinho o el jugador que esté tirado por su misma zona para hacer diagonales hacia adentro y abrirle espacios. La idea de Tite es que con los laterales jugando por dentro, puedan también los extremos entrar al área y generar densidad en el último cuarto de cancha juntando jugadores hábiles para el mano a mano o cambios de ritmo.

El gol de Dani Alves ante Perú es reflejo de eso, el capitán se juntó primero con Arthur para luego ir avanzando como interior al área y soltar la última pared con Firmino antes de rematar.

Armonía en la plantilla

Richarlison fue sustituido en el entretiempo ante Venezuela, siendo uno de los mejores en ataque en ese momento de Brasil. Cuando finalizó el partido, el jugador en zona mixta rechazó cualquier intención de generar rumores sobre una supuesta inconformidad con Tite por la modificación.

El jugador del Everton de Inglaterra fue contundente al señalar que cualquiera de sus compañeros está en condiciones para ser titular o entrar desde el banco y que nunca discutirá las decisiones de Tite, un técnico que pregona en cada rueda de prensa el buen ambiente que vive con sus dirigidos, quienes le han enseñado a volverse más cercano a ellos y lo ratifica diciendo que llama a Everton por su apodo ‘Cebolinha’ y que bromeaba con los delanteros en algunas prácticas cuando fallaban en la definición.

Poca exigencia en defensa

Venezuela tirando pases largos y Perú en los primeros minutos del partido, exigieron un poco la defensa de Brasil. La línea de cuatro de la selección local sufre más por los costados cuando sale al ataque con Filipe Luis y Dani Alves, los relevos entre Marquinhos, Thiago y Casemiro, a veces fallan y aunque no recibieron goles. En la siguiente fase puede venir un rival que los exponga más en una fase poco conocida hasta ahora en este torneo por parte de los anfitriones.