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LEVANTE - BETIS

Paco y Quique Setién agotan ya sus últimas oportunidades

Levante y Betis pelean por el descenso y por Europa (21:30, GOL). Los locales, sólo dos victorias en los últimos 19 partidos.

El Betis se juega en Orriols una de sus últimas bazas en su lucha por llegar a Europa.
El Betis se juega en Orriols una de sus últimas bazas en su lucha por llegar a Europa. ALBERTO IRANZODIARIO AS
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Llega el tramo final. La fase decisiva. Donde los puntos son los mismos de siempre pero parece que valen más. Porque ya no vuelven. Porque las oportunidades se acaban (sigue el partido en directo en As.com). Y porque la necesidad aprieta. Para casi todos. Por eso es la época en la que se habla de finales. Y aunque no en su sentido más literal del término, tiene todo lo que acontece. Porque aquí el que gana sigue adelante. Y el que pierde se descuelga. Supervivencia pura.

Y ahí andan Levante y Betis. Cada uno con sus preocupaciones. Y los deberes por hacer. Dos equipos cortados por el mismo patrón. Calidad, balón, posesión, estrategia, goles. Alegría y descuidos al mismo tiempo. Mezcla explosiva que no siempre sale bien. Hoy, Setién anda a vueltas en la delantera en busca del gol perdido. Paco, con su dibujo. Sin Rochina pierde mucho y arriba Roger y Mayoral siguen peleando por un puesto.

Mucho más agónica la situación de los granotas que ya ven el descenso como una cruda realidad a la que no pensaban enfrentarse viéndose galantes en la primera vuelta del torneo. El castigo es mucho. La Segunda es muerte para un equipo que suma solo dos triunfos en los últimos 19 partidos y es el más goleado de la categoría. Duro lastre. La retaguardia es su punto más débil y los rivales lo saben. Muy fácil hacerle daño. Y la presión ahora juega un factor aún más importante casi que lo futbolístico.

Las miras de los de Setién son por arriba. Europa, el objetivo. La golosina. La séptima plaza es lo que les queda. Y hasta el final deberán pelear por ella. Pero los béticos van de revés en revés y a estas alturas, su principal problema es que ya se dé por terminada la temporada.