El Levante se la juega ante un Espanyol con los deberes hechos
Rubi podría ejercer de verdugo granota en su vuelta al Ciutat de València donde salió por la puerta de atrás tras el último descenso en la 15-16.
Se acaba el tiempo para un Levante que cada vez tiene el descenso más cerca. Y menos capacidad de reacción. Por eso, aunque luego aún tendría alguna oportunidad más, en estos cuatro días se juega la temporada. Y no es presión añadida, es la realidad. Espanyol y Betis visitan Orriols y la ecuación no puede dar menos de seis puntos. Cuatro podrían ser suficientes pero mejor no tentar a la suerte (sigue el partido de hoy en directo en As.com).
Para empezar, los pericos.Vuelve Rubi al Ciutat de València, estadio que le acogió en la campaña 15-16, precisamente en la que el Levante firmó su último descenso a Segunda División. El técnico catalán llegó para sustituir a Lucas Alcaraz y no congisuió revertir la situación. Terminó saliendo por la puerta de atrás y ahora vuelve con su nuevo proyecto, el del Espanyol, con los deberes hechos, y podría ser el verdugo granota. Porque Iglesias, Granero, Darder y compañía no entienden de reencuentros ni compasión.
La presión será clave. Saber manejarla. Sobre todo para los granota que andan ya con el agua al pecho, les falta un poco para que llegue al cuello. Paco López trata de levantar a la tropa tras su caída libre con solo dos triunfos en 18 partidos y su último descalabro en Mestalla. El técnico morirá con los suyos. No le queda otra. Y tampoco tiene más. Aitor parece que resiste a las dudas en la portería. Vezo lidera una endeble zaga, las más goleada de la categoría. Campaña y Rochina, llamados a agarrar bien fuerte el timón, que no se suelte y descarrilen. Y arriba, confianza plena en los galones del Comandante y la pólvora del pistolero. Todo lo demás es inocuo. Todo lo demás no vale. Todo lo demás es descenso. Y Orriols se resiste. Su equipo, también.