Godín recupera su mejor versión con su futuro todavía en el aire

El mejor Diego Godín ha vuelto en los últimos partidos. El uruguayo ha rozado la perfección en sus dos últimos encuentros, contra Juventus y Real Sociedad, donde además de mostrarse infranqueable por abajo ha sido un muro en el juego aéreo y ha añadido una importancia capital en el área rival. Mientras, continúa sin renovar un contrato con el Atlético que finaliza en junio y en el Inter de Milán ven su llegada cada vez más cercana. 

Beppe Marotta, CEO del Inter, declaraba la semana pasada que "estoy feliz por Godín, estamos muy adelantados en la negociación. Fue un placer y es una señal, pero no añado nada más. Estamos muy adelantados y, tan pronto como sea posible, podemos hacer un comunicado oficial". Pero de momento, el uruguayo sigue perteneciendo al Atlético y su rendimiento no sólo no se ha resentido por el interés desde Italia, si no que ha recuperado la mejor versión del central que en febrero cumplió 33 años y que afronta el final de temporada en un nivel espectacular, formando una pareja fantástica con su compatriota Giménez.  

Ante la Juventus, Godín añadió un gol a su clase magistral defensiva donde el equipo bianconero tan sólo pudo rematar dos veces a puerta con peligro a partir de faltas, topándose en las dos con un gigante Oblak. El '2' marcó el segundo tanto del partido en el rechace de un balón que él mismo había peinado tras una falta sacada por Griezmann. Con Giménez, que marcó el primer tanto del partido, volvieron a secar a un Cristiano Ronaldo que se ha quedado sin marcar las seis veces que se ha medido con los uruguayos en el once. La gran actuación contra la Juventus sirvió a Godín para ser nombrado como jugador de la semana en la Champions.

Tras descansar ante el Villarreal, Godín volvió al centro de la defensa en Anoeta y volvió a estar sobresaliente. Ante el equipo vasco volvió a añadir a su clinic defensivo una aportación vital en ataque, ya que asistió a Morata en el primer gol del partido peinando un balón de cabeza para el remate del punta. El Atlético resistió las acometidas de la Real Sociedad a pesar de jugar media hora con uno menos en gran parte por el buen hacer de su pareja de centrales, formada por Godín y Giménez. El capitán logró 10 despejes en centros laterales de los jugadores del club donostiarra, que buscó hacer daño por arriba encontrándose con un muro. La única vez que consiguieron rematar con peligró fue con un cabezazo de Merino que también se encontró con Oblak. 

Un Godín que tiene entre ceja y ceja el partido de Turín ya que no podrá estar el próximo sábado ante el Leganés por sanción tras ver su quinta amarilla liguera en Anoeta. El central no quiere irse del Atlético sin pelear por una última Champions y este año la final se disputa en el Wanda Metropolitano. Pese a no haber renovado y a que su futuro parece lejano tras acabar la temporada, ha dejado claro que sólo piensa en hacer algo grande en lo que resta de curso con un nivel actual como en sus mejores días de rojiblanco.