Cómo el Atleti puede parar a Cristiano y ganar a la Juve
Custodiar a Pjanic con la presión, impedir las recepciones entre líneas de Cristiano y Dybala... Simeone, preocupado por el juego aéreo.
Entre un Atlético dubitativo y su ambición máxima de alzarse con la Champions se interpone primero un hueso como es la Juventus. Por sus condiciones futbolísticas es un rival extremadamente delicado con un potencial ilustre en casi todos los aspectos del juego. Es el equipo de Allegri un bloque conjuntado, inteligente y notabilísimo en ataque. El Atlético se enfrentará a distintos desafíos tácticos durante una eliminatoria que se prevé larga y medirá sus posibilidades de éxito en su capacidad para encontrar las fragilidades bianconeras.
Freno a Pjanic
La Juventus puede presumir de tener un gran volumen de juego, con una media de posesión del 56%, y un buen trato de pelota. Por Pjanic gira la creación. El bosnio apoya en la salida a los centrales y como es conocido ejerce de constructor en la medular. El Atleti debe atar en corto la asociaciones de Pjanic e impedir que reciba suelto. Es un jugador brillante en la circulación (72 pases por partido) con una lectura adecuada de lo que necesita la jugada en cada momento. Simeone medita alinear a cuatro centrocampistas puros como son Thomas, Rodrigo, Koke y Saúl para buscar superioridades por dentro con o sin balón. Apretar a Pjanic limitará la expresividad de la Juve. Bentancur toma demasiados riesgos y Matuidi es un jugador con un rol más vertical. Cuando se ve apurado, el conjunto de Allegri mira a las conducciones desde de atrás de Bonucci como método de avance.
Tridente ofensivo
El entendimiento de Dybala, Mandzukic y Cristiano acentúa el poder de la candidatura al título de la Juve. Forman una sociedad móvil, intercambian posiciones y ganan el área con facilidad. Las recepciones entre líneas de Dybala y Cristiano sirven para la progresión juventina. Al portugués le gusta escorarse a la izquierda como hizo en su etapa en el Madrid. Thomas y Rodrigo no pueden perder la espalda y desconectarse de la línea defensiva. Cristiano y Mandzukic cargan el remate (11 disparos por partido de la Juve) y Dybala espera en una segunda línea para desembarazarse de las vigilancias defensivas. Así marcó en Old Trafford durante la fase de grupos.
Cristiano siempre será la amenaza. Con 21 goles y 10 asistencias, mantiene su vigencia en zonas de finalización. Su aceleración en los últimos metros y rupturas entre los centrales pueden desarticular a Giménez y Godín. Cuando el Atlético se asiente en un bloque bajo, algo normal en el librillo de Simeone en algunas fases de los partidos, no puede perder de vista los desmarques de Cristiano. Con Pjanic se relaciona bien.
Juego aéreo
Simeone ha incidido en los últimos entrenamientos en el peligro de la Juventus por alto. Es una cualidad evidente de los de Allegri. A balón parado reúne jugadores de máximo nivel en este capítulo como Mandzukic, Cristiano, Bonucci o Chiellini. Con Pjanic como lanzador habitual, cada uno asume un papel distinto y mezclan con sentido. Si Cristiano ataca el primer palo, Mandzukic o Bonucci se mueven hacia el segundo. Contra el Frosinone, último partido liguero, marcaron así. La Juve ha hecho diez goles de estrategia este curso. Asimismo, Mandzukic y Cristiano destacan también en los centros laterales. Joao Cancelo, extraordinario esta temporada, y Alex Sandro llegan con asiduidad y tienen buen pie en los envíos desde las bandas (cuatro de media de cada uno).
La profundidad rojiblanca
La jerarquía defensiva de la Juventus es otra de sus señas de identidad. Lo ha sido en las últimas temporadas y no es menos en ésta, pero el Atlético puede desarmarle si logra lanzarse al espacio. La agresividad de Bonucci y Chiellini, acostumbrados a salir a interceptar casi en campo rival, debería permitir situaciones en las que Morata y Griezmann puedan correr a la espalda de ambos. Los centrales de la Juve sufren fuera de su zona. Si juega Diego Costa, esta opción se reducirá por el estado físico del hispano-brasileño. El Atlético también podrá encontrar ventajas en los carriles por la postura de Cancelo y Alex Sandro. Su vocación ofensiva debilita el repliegue bianconero y le desnuda, en ocasiones, durante las transiciones.
La circulación en ataque
La intención de Simeone de apostar por el calificado como cuatrivote (Thomas, Rodrigo, Koke y Saúl) tendría que favorecer el control en los ataques posicionales del Atlético. Mover rápido el balón entre el centro y la banda desajustará a la Juventus. Si Bentancur y Matuidi acuden a las coberturas de los laterales, aparecerán las grietas por dentro. Si mantienen su posición, el Atleti podrá desenvolverse por fuera. Se espera el trabajo de Cristiano y Dybala para equilibrar a la Juventus. De la labor defensiva de Mandzukic en la banda izquierda nadie tiene dudas.