Cristiano 'vacía' el Bernabéu
La marcha del portugués coincide con el bajón de asistencia en el estadio blanco: 5.509 espectadores menos de media en total; casi 11.000 menos en Champions.
La imagen empieza a ser habitual este curso. El Santiago Bernabéu presentó un aspecto muy pobre en la visita del Rayo Vallecano al Real Madrid (1-0 para los blancos): apenas 55.229 personas vivieron en directo el derbi madrileño, apenas un 68% del aforo del estadio blanco (81.044). Es la tercera entrada de este tipo seguida, tras las registradas ante el Melilla (triunfo por 6-1), con 55.243 espectadores, y ante el CSKA (derrota por 0-3), con 51.636. De los doce partidos que el Bernabéu ha acogido este curso, sólo sobrepasó la barrera de los 60.000 aficionados en siete de ellos y la de los 70.000, en una única ocasión: en el derbi ante el Atleti (0-0), al que acudieron 78.642 personas, el 97% del aforo total.
Varios motivos explican el bajón: la mala marcha del equipo, con cambio de entrenador incluido, la subida del precio de los abonos en un 10%, la falta de caras nuevas en una plantilla muy conocida por la afición... y la ausencia de Cristiano, el gran atractivo del Real Madrid en la última década y que se marchó sin que Florentino acometiese un fichaje de relumbrón con el que llenar, al menos en parte, el vacío dejado por el portugués cuando se fue traspasado a la Juventus. Un efector vaciador, el de la marcha de Cristiano, que se vio ya desde el primer día: el Madrid arrancó la Liga contra el Getafe (2-0) ante 48.466 espectadores, la entrada más baja del Bernabéu desde el 24 de mayo de 2009... Precisamente el último partido del Madrid en casa previo al fichaje de Cristiano por el club blanco. El equipo merengue no registró una entrada tan pobre como en la primera jornada de la Liga 2018-19 mientras Cristiano vistió la camiseta blanca.
Ese bajón se ve claramente con los números en la mano: a estas alturas del curso pasado (quitando la vuelta de la Supercopa de España, que el Madrid no disputó esta campaña), el Bernabéu había recibido a 819.569 personas personas en doce partidos, 68.297 por partido de media. Esta temporada, la asistencia total cae a 753.462 espectadores (un 8% menos), 62.788 de media en cada encuentro. Son 5.509 personas menos en cada partido animando al Madrid. En la 2017-18, en el mismo tramo de temporada, sólo fueron al Bernabéu menos de 60.000 espectadores en un partido (en Copa ante el Fuenlabrada, 2-2).
Precisamente la Copa es la única competición en la que el Madrid puede decir que la asistencia al estadio ha aumentado. De los 49.638 que vieron el Madrid-Fuenlabrada de vuelta de dieciseisavos de final hace un año se pasó ante el Melilla a 55.243. Pero en Liga y Champions, las competiciones que han acogido once de doce partidos del Madrid en el Bernabéu, la caída es evidente. En Liga, el curso pasado el Madrid había recibido en las primeras ocho jornadas como local a 548.986 visitantes, 68.623 de media; este año son 509.976 (39.010 menos), 63.747 por partido (4.876 menos).
Y en Champions viene el gran bajón: el curso pasado el Madrid recibió en fase de grupos a 220.972 espectadores, nada menos que 73.657 de media; este curso han sido 188.243, 62.748 por partido. Son 32.729 menos en total y casi 11.000, exactamente 10.909, por partido. Cifras muy elocuentes: la campaña anterior, ente APOEL, Tottenham y Borussia, el Madrid no bajó de 70.000 espectadores en ningún partido; en ésta, contra Roma, Plzen y CSKA, no ha llegado a esa cifra ni una vez.