¿Qué fue de Pires? El campeón Mundial que jugó en Villarreal
El centrocampista francés maravilló en el Arsenal y jugó cuatro temporadas a un alto nivel en la Liga. Ganó el Mundial 1998 con Francia, único campeonato galo.
Hablar de Robert Pires es hacer mención a la técnica y la sutileza personalizada. El futbolista francés fue una pieza clave en un Arsenal invencible y participó en el Mundial de 1998 donde los galos levantaron su primer y único título de estas características hasta el momento a la espera de que los Griezmann y compañía puedan repetirlo en Rusia. Jugador de banda sin tener como punto fuerte la velocidad pero sí el cambio de ritmo, gracias a sus amplias zancadas proporcionadas por su 1,87 de altura, se convirtió en el terror de los porteros con sus disparos lejanos con rosca buscando el palo contrario. Pires dejó los gunners tras seis grandes temporadas para jugar cuatro cursos en el Villarreal donde demostró que su calidad seguía intacta. Actualmente no se ha desligado del Arsenal, ya que juega con su equipo de veteranos y les representa en diversos actos además de colaborar con BeinSport participando en debates futbolísticos y comentando partidos con asiduidad.
Robert Emmanuel Pires (Reims, Francia, 29 de octubre de 1973) debutó en la liga francesa en el año 1993 con el Metz, club al que había llegado recién cumplida la mayoría de edad desde la cantera del equipo juvenil de un Stade de Reims que no poseía dinero para hacerle un contrato profesional. Nacido en la ciudad situada al noreste de Francia, su madre asturiana Maribel le dio el toque español a su infancia mientras que su padre portugués le aportó carácter trabajador e ibérico. Tras seis temporadas a gran nivel en el Metz (ganando la Copa y quedando segundo en liga en el año 1997), el Olympique de Marsella se lanzó a por sus servicios después de haber demostrado una técnica superdotada y una llegada desde atrás inhabitual que se vio reflejada en los 13 goles conseguidos en la temporada 1997/98 que conllevó su fichaje por los marselleses y su convocatoria para el Mundial que se iba a disputar en su propio país.
En una selección liderada por Zidane, Thuram, Henry, Trezeguet, Djorkaeff, el actual seleccionador francés Deschamps, Barthez, Lizarazu o Petit, los novatos como Pires o Vieira participaron en el título Mundial conseguido por los galos desde segunda línea, pero tuvieron minutos para hacer historia en el fútbol francés. Pires participó en tres partidos en aquel histórico Mundial donde disputó 11 minutos en la victoria ante Arabia Saudí (4-0) y 72 minutos en el triunfo frente a Dinamarca (2-1) de fase de grupos y en los últimos 56 minutos del partido de octavos de final contra Paraguay en la victoria por 1-0 en el minuto 113 de la prórroga participando en el Gol de Oro logrado por Blanc en el que centró para que Trezeguet dejase muerto el esférico de cabeza para que definiese el central. No llegó a jugar en cuartos ante Italia (victoria en los penaltis por 4-3), en semifinales contra Croacia (2-1) y en la final frente a Brasil (3-0) con un doblete de Zidane y un tanto de Petit.
En sus dos temporadas en el Marsella tuvo un primer año fantástico, donde el equipo acabó segundo en liga a un punto del Girondins de Burdeos y llegó hasta la final de la UEFA cayendo por 3-0 en Moscú contra el fantástico Parma de Buffon, Cannavaro, Thuram, Verón, Crespo, Asprilla o Chiesa. Pires participó en 47 partidos y anotó 9 goles acabando como una de las grandes figuras del equipo. Su siguiente curso no fue tan fructuoso y los problemas con los aficionados marselleses y con los propios directivos del club se multiplicaron. Al acabar la temporada el centrocampista decidió salir del equipo, aunque antes fue citado por Francia para disputar la Eurocopa donde volvería a proclamarse campeón. Jugó poco, pero acabó siendo clave disfrutando de la prórroga en semifinales contra Portugal, donde definió un Gol de Oro de Zidane en el minuto 117 de penalti y de 18 minutos en la final ante Italia asistiendo a Trezeguet en el minuto 113 para el Gol de Oro que dio el título a los galos. Tras esto acabó fichando por el Arsenal a cambio de siete millones de euros como sustituto de Overmars (se marchaba al Barcelona), pese a que parecía que acabaría jugando en el Real Madrid, algo que después confesaría en El País que se debía a que “los aficionados del Marsella son muy agresivos y pesados. Y por eso no fiché por el Madrid, porque sabía que era lo mismo, y no quería que se repitiera. Elegí el Arsenal”.
Pires se decantó por un equipo afrancesado, con Arsene Wenger en el banquillo, Henry como estrella y goleador y Vieira, Wiltord, y Grimandi en plantilla donde disfrutó de un primer año de aclimatación en el que fue de menos a más (acabó marcando 8 goles en 51 partidos) con el '7' a la espalda, dorsal que le acompañaría el resto de su carrera. Además ganó la Copa Confederaciones finalizando como Bota de Oro de Francia con dos goles. En el curso 2001/02 Pires mostró los mejores meses de juego de su carrera, imparable, definitivo en los últimos metros y asistiendo con facilidad a sus compañeros, pero en abril con el título de la Premier, FA Cup y Community Shield en la mano y el Mundial a la vuelta de la esquina sufrió una rotura de ligamentos que provocó que tuviese que estar seis meses de baja cuando había participado en 45 partidos y anotado 13 tantos. El francés levantó el título liguero en un gran homenaje de compañeros y aficionados y no pudo estar en el torneo disputado en Corea y Japón donde se presentaba como una de las grandes estrellas de una selección que defendía título y que fracasó cayendo en la primera fase sin ganar ni un sólo partido.
Partiendo habitualmente desde la banda izquierda a pierna cambiada para buscar el recorte hacia adentro y el disparo al palo largo, el Arsenal logró un fantástico equipo culminado en la temporada 2003/04 con el título de Premier League sin perder ni un sólo partido. Al grupo de los franceses se unían un genial Dennis Bergkamp, el talento de Ljungberg, Reyes y un adolescente Cesc Fábregas y el trabajo de los Gilberto Silva, Ashley Cole, Campbell, Lauren y Lehmann entre otros. Pires culminó la campaña anotando 19 goles en 51 partidos demostrando una llegada descomunal unida a su visión de juego y aprovechando que Henry caía a la banda izquierda para entrar por la media punta sorprendiendo a las defensas rivales. Sería titular en la Eurocopa de 2004 donde Francia fue eliminada en cuartos ante Grecia. Cubierto de creatividad, un exceso de ella junto al ‘14’ dejó una jugada para la historia en octubre de 2005, el intento fallido de repetir el penalti indirecto llevado a cabo por Cruyff y Jesper Olsen y años después por Messi y Luís Suárez. Pires tocó el balón para cedérselo a Henry, pero lo hizo demasiado flojo sin que el esférico se moviese del punto de penalti indicando el árbitro libre indirecto a favor del Manchester City.
En su última temporada en el club inglés rozó su primera Champions League, pero el Barcelona se impuso en la final de París remontando el tanto inicial de Campbell y aprovechando que el Arsenal jugó casi todo el partido con un futbolista menos por la roja vista por Lehmann a los 18 minutos. Esa expulsión provocó que Pires fuese el gran sacrificado, dando entrada a Almunia para cubrir la portería inglesa. Los gunners habían eliminado en semifinales a un histórico Villarreal que tuvo en un penalti de Riquelme en el minuto 89 la oportunidad de forzar la prórroga para estar en su primera final de la historia. El fútbol combinativo del Submarino Amarillo sedujo a un Pires que decidió firmar con el Villarreal de Forlán y Riquelme cerrando su etapa en el Arsenal tras las seis mejores temporadas de su carrera en las que disputó 283 partidos y marcó 83 goles además de aportar 34 asistencias.
Pero nada más llegar al equipo castellonense Pires sufrió una rotura de ligamentos cruzados en la rodilla izquierda en el Trofeo Carranza que provocó que su debut oficial en Liga se postergase hasta el 18 de marzo de 2007. En su segundo partido marcó contra el Betis, pero en el tercero vio la roja directa ante el Atlético. Se haría con el puesto de titular en el final de campaña marcando un gol contra el Barcelona en la victoria por 2-0 y otro en el triunfo ante Osasuna (1-4) y acabó el curso con tres tantos en 13 partidos. En su segunda temporada participó en 39 partidos, 32 de ellos como titular y anotó tres tantos. Pires se convertiría en pieza básica en el Villarreal jugando 77 partidos en las dos siguientes temporadas y anotando 11 tantos más, algunos de ellos de preciosa factura. El francés se midió al Arsenal en cuartos de final de la Champions recibiendo una ovación atronadora en el Emirates donde el Submarino Amarillo quedó eliminado. Pires dejaría el Villarreal en verano de 2010 para volver a la Premier donde firmó con el Aston Villa por una temporada en la que jugó 12 partidos maltratado por los problemas físicos. Estos le llevaron a anunciar su retirada, aunque volvería al fútbol en 2014 para jugar sus últimos minutos en el FC Goa de la Liga Super en la India hasta colgar definitivamente las botas.
Desde entonces Pires no se ha desligado del Arsenal, jugando con su equipo de veteranos como hizo recientemente en el Santiago Bernabéu ante el Real Madrid y compareciendo como emisario del club en torneos como en la International Champions Cup. Además, el francés se ha convertido en un reputado analista y comentarista futbolístico en el medio BeinSport en su edición francesa e inglesa donde es recordado como un mito de la selección y de la Premier en donde está considerado uno de los mejores jugadores de la historia del Arsenal.