Rodrygo teme lesionarse y no jugará esta noche en Río
El Santos ha pedido al Real Madrid partidos amistosos y que el delantero permanezca hasta finales de 2019. En las próximas horas se hará oficial.
El acuerdo entre el Real Madrid y el Santos por Rodrygo se cerró anoche por 45 millones de euros y en las próximas horas las tres partes tendrán los contratos firmados. Solo faltan unos pequeños flecos para que los clubes lo hagan oficial. Los santistas intentan por todos los medios que su delantero siga en el litoral de Sao Paulo hasta finales de 2019, pero va a ser complicado conseguirlo.
Otro punto a tratar es el acuerdo por unos amistosos entre el Real Madrid y el Santos, tal y como se firmó cuando Neymar fichó por el Barcelona. Aunque en esa ocasión solo se jugó el primero de los dos (en el Camp Nou y con goleada azulgrana por 8-0). “Pedimos el dinero de la cláusula y el valor son 40 millones de euros. En ese aspecto ya hemos acordado con el jugador el pago de la cláusula. Ahora estamos enfocados en algunas exigencias que hemos presentado, como el juego de algunos amistosos. Todo eso debe ser discutido. En el contrato queda claro que Rodrygo se quedará un año más aquí, aunque pedimos un año y medio más. Solo falta eso”, contó el presidente Jose Carlos Peres a SportTV.
Y las negociaciones han pillado a Rodrygo a pocas horas de jugar un encuentro del Brasileirao en Río de Janeiro ante el Fluminense. El jugador abandonó la concentración en cuanto se filtró el acuerdo y se refugió en su casa para estudiar un contrato que asciende a 4 millones de euros anuales. Las informaciones son confusas al escuchar a las dos partes. El agente sostiene que la ausencia del delantero en el último entrenamiento estaba pactada con el club, pero la directiva lo niega.
Por eso su presencia en Río esta madrugada está descartada. Son momentos tensos en la vida del atacante y para evitar riesgos innecesarios no viajará esta noche a tierras cariocas, a pesar de que el presidente ‘peixe’ estudiara la posibilidad de hacerle un seguro médico para evitar que la operación se cayera. “Entendería que el jugador nos dijera que no tiene la cabeza para jugar. Una lesión puede echar por tierra una negociación de esta envergadura. Queremos firmar y que esto acabe. Pero estamos analizando la posibilidad de hacer un seguro para que mañana pueda jugar. Él teme lesionarse y esto es algo que debemos tener en consideración”, desveló el presidente brasileño.