As ya logró reunir a Sergio Ramos y Pirri en el año 2005
Ramos era un crío de 19 años que había fichado por el Madrid tres meses antes por 27 millones de euros. De niños los dos jugaban al ataque.
Fue en la mañana del 7 de noviembre de 2005. As reunió en el Bernabéu a Sergio Ramos (por entonces un crío de 19 años que había fichado por el Madrid tres meses antes por 27 millones de euros) y a Pirri. El todoterreno ceutí era el espejo en el que quiso mirarse el camero. Y acertó de pleno. De niños los dos jugaban al ataque, pero las circunstancias les obligaron a retroceder muchos metros en el campo. Eso sí, ninguno perdió su olfato goleador. Pirri completó sus 16 años de blanco con 171 goles. Una barbaridad. Sergio Ramos va ahora por los 72, incluido el inolvidable de Lisboa ante el Atleti... Recuerdo lo divertido que fue su saludo inicial (no se conocían hasta ese momento). Para romper el hielo, Pirri le dijo: “Sergio, ¿sabes que a mí me bajaron en helicóptero una vez al césped del Bernabéu? Y eso que yo odio las alturas...”. Sergio le arrancó una sonrisa con su respuesta: “Maestro, pues a mí me encantan las alturas. Mi sueño es tirarme un día en paracaídas”.
Durante la conversación, el sevillano se puso la bola de cristal con una profecía que al final se ha cumplido: “Para mí, Raúl es un referente también por su ambición y los títulos conseguidos. Sería un honor seguir sus pasos y poder ser algún día capitán del Real Madrid”. En aquella época se debatía sobre la posición idónea de Ramos, que al principio jugó varias veces de mediocentro y otras de lateral derecho: “Me siento a gusto en el centro del campo, pero donde me pongan iré a tope”, nos decía sin saber que acabaría de central jerarquizado del Madrid y de la Selección. Pirri, famoso por su gran ojo clínico en el informe que llevó su nombre, lo definió de lujo: “Sergio es el fichaje más importante del Madrid en años. Defiende, puede ayudar en la medular y llega muy bien arriba. Me recuerda a mí cuando llegué con la misma edad, 19 años. De verdad que le veo como un buen goleador para nuestro equipo...”. Lo clavó Pepe Martínez ‘Pirri’, una leyenda viva del Real Madrid.