Giroud complica al Liverpool su puesto para jugar la Champions

El Liverpool podría tener que esperar hasta la última jornada para confirmar su clasificación para la próxima Champions League tras caer 1-0 en su visita al Chelsea. El rival del Madrid en la final todavía saca tres puntos a los Blues y uno al Tottenham pero su cuarta plaza pende de un hilo al haber jugado un partido más que sus rivales. No obstante, si los equipos londinenses ganan sus partidos restantes, los Reds tendrán también que sacar tres puntos ante el Brighton en su último encuentro de liga o ganar a los blancos en Kiev para jugar la próxima Champions.

El Chelsea necesitaba ganar para seguir soñando con la Champions pero durante la primera media hora no lo pareció. Cedió el balón al Liverpool y lo fió todo a que Hazard o Giroud dieran un zarpazo al contragolpe.

El Liverpool solo reservó a Henderson de cara a la final de Champions y, sin necesidad de exprimirse al máximo, pareció estar siempre un paso por delante de su rival. El Chelsea le dejó jugar y, a los 10 minutos, Courtois tuvo que salir al rescate Blue para evitar lo que pudo ser el 0-1 de Firmino.

Salah, que venía de dos partido sin marcar, volvió a jugar a medio gas pero Mané cogió su testigo para probar otra vez a Courtois con una doble ocasión a la media hora.

El Chelsea se dio al fin cuenta de que su plan no funcionaba y dio un paso al frente para intentar cambiar el guion al partido. Entonces, Bakayoko mandó un primer aviso a Karius con un tímido cabezazo y, a la siguiente jugada, Giroud impuso su poderío aéreo ante la defensa Red para hacer el 1-0 tras un gran centro de Moses.

El Liverpool siguió teniendo la posesión pero el Chelsea gozó de las mejores ocasiones. Cesc tuvo otra justo antes del descanso y Hazard le hizo la réplica nada más salir de los vestuarios.

Bakayoko incluso llegó a hacer un segundo tanto que no valió por fuera de juego y Klopp se vio obligado a meter a Henderson, Solanke y Alberto Moreno para intentar revertir la situación. Tampoco funcionó. El Liverpool acabó volcado sobre el área del Chelsea pero nunca estuvo cerca de un empate que habría sabido a oro.