La Real Sociedad cae en Austria y se despide de Europa
El equipo de Eusebio Sacristán no pudo con 10, por expulsión de Navas, ante un Salzburgo que supo manejar mejor la ventaja de los goles de Anoeta.</br><a title="Eintracht Frankfurt - Chelsea en directo: Europa League, en vivo" href="https://as.com/futbol/2019/05/02/uefa/1556819308_901667.html">Eintracht Frankfurt - Chelsea en directo: Europa League, en vivo</a>
La Real Sociedad sabía que necesitaba marcar para pasar de ronda, y consciente de ello salió fuerte, buscando la portería del Salzburgo para encarrilar el partido pronto, y espoleado por los 2000 seguidores realistas que estaban en la grada dejándose la garganta, cumplieron a la perfección esa premisa inicial. Hacía mucho frío, -7 grados, pero la Real salió caliente. Era lo que necesitaba, pero el equipo austríaco no daba muchas facilidades, bien plantado en defensa y con un orden táctico muy rico, ya demostrado en la ida en Anoeta.
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Aún así, sufría cuando atacaba el Salzburgo, y en su primer despiste permitió que los austriacos entraran por banda con Lainer para centrar a Dabbur, que pilló desprevenida a la defensa de la Real. Los realistas se repusieron del ese mazazo y cuando Januzaj se activó, cambiaron de marcha en ataque para provocar el córner con el que marcaba el gol de la esperanza. Raúl Navas se elevaba por encima de todos para marcar un golazo de cabeza. Ese 1-1 metía de lleno a la Real en la eliminatoria con toda la segunda parte por disputarse.
Eusebio agitaba la coctelera dejando en el banquillo a Alberto De la Bella y cambiando de sistema para pasar a jugar con tres centrales, con la entrada de Llorente. Pero el cambio no surtió efecto alguno, porque los donostiarras perdieron todo su punch en ataque y aunque el Salzburgo tampoco se acercaba a la portería de Rulli, se mostraba cómodo sobre el césped, sin pasar apenas apuros. La Real, eso si, lo intentaba, no paraba, pero sin hacer daño. El partido circulaba insulso, hasta que llegó la jugada clave de la eliminatoria. Raúl Navas agarraba a Hwang y el arbitro le señala la segunda amarilla que suponía su expulsión. La Real se quedaba con diez jugadores y un minuto después, Rulli cometía penalti sobre Hwang, que luego suponía el gol de la derrota final. Un minuto fatídico al que no pudo sobreponerse el equipo realistas, a pesar de dejarse el alma hasta el final por buscar la prórroga, incluso con un disparo de Bautista. Pero no pudo ser.
