La Unión Deportiva cerró el pasado sábado la posibilidad de que Roque Mesa saliera traspasado al Sevilla a pesar de haberse cerrado un acuerdo verbal sólo pendiente de la firma de las partes un día antes entre presidentes en la asamblea de la Federación española.
Los amarillos rechazaron los 8.5 millones al considerar que el jugador era importante para el proyecto de futuro, pero con el paso de las horas transcendió que los servicios médicos de los grancanarios habían alertado del preocupante estado de las lesiones de Hernán y Javi Castellano, que no se terminan de encontrar en condiciones óptimas, lo que provocó la ruptura del compromiso al considerarse que la salida del jugador teldense sería perjudicial para la plantilla canaria.
En las últimas horas a empezado a sonar con fuerza que el Valencia CF, con dinero fresco después de confirmarse la venta del luso André Gomes al FC Barcelona, estaría interesado en pujar por el canterano de los amarillos que es, junto a al malaguista Ignacio Camacho y al sevillista Vicente Iborra , uno de los que gusta al director deportivo d el conjunto valencianista, Suso García Pitarch. Que lo ha seguido muy de cerca y que avalaría la contratación del mediocentro canario.
A pesar del interés de los ché habrá que saber si el equipo presidido por Miguel Ángel Ramírez habrá cambiado de opinión y sigue pensando que la salida de su jugador es inviable por los problemas no solucionados de sus dos compañeros en el medio campo.