Cebolla: "En el Atlético siempre jugaban los mismos once"

El Cebolla Rodríguez se fue al Parma y después al Gremio (equipo con el que acaba de rescindir contrato) porque quería jugar. "Opté salir por mi cuenta, allí estaba cómodo y me llevaba bien con todos, pero no jugaba...", le confesó a Montevideo Portal en una entrevista. "Es que en el Atlético siempre jugaban los mismos once. Y es difícil hacer cambios cuando a un equipo le va bien. El Atlético fue de menos a más, empezó a ganar títulos y siempre jugaban los mismos, con uno o dos cambios. Ahí decidí intentar salir, porque por más que uno entrene y ponga voluntad... Él (Simeone) me ponía como ejemplo porque yo me mataba entrenando y nunca ponía mala cara", especificó. Convocado por Uruguay para la Copa América, cuando termine la competición volverá al club rojiblanco, con quien le une un año más de contrato.

Cebolla también habló del Parma que se encontró cuando partió en enero hacia Italia, cedido. Y lo que cuenta suena muy crudo: "Me mintieron. Fui con Bronzetti, uno de los representantes más conocidos en Italia, y él me dijo que me iba a ir muy bien en Parma, que iban a entrar 100 millones (de euros). En mi caso eran solo algunos meses, pero a algunos hacía siete meses que no les pagaban, y lo mismo para masajista, kinesiólogo y demás". Y él lo pasó mal. "Todos los días era un problema diferente", cuenta. Además, no cobró nada, ni un céntimo: "ni un mes de salario, y tuve que hacer la mudanza, contrato nuevo de teléfono, conseguir casa, pagarla, etcétera... y cuando tuve la posibilidad de salir (el Parma estaba en quiebra), yo decidí salir para poder jugar. Algunos jugadores del Parma me decían: "Yo en tu lugar ni lo dudo: me voy". Y me fui".

Peñarol es el club de su vida, su raíz en el fútbol, y la posibilidad de volver siempre está ahí, rondando: "Claro. Llamé a (Jorge) Barrera y le dije: "en lo legal, ¿qué posibilidades hay de ir estos meses a Peñarol?". Porque ahí iba a estar cerca del campo, de mi familia, de Juan Lacaze. Pero lo de Peñarol lo vengo manejando hace tiempo: mi idea es volver a los 31, dentro de dos años. Por más que uno sea fanático y quiera mucho al club, la carrera del jugador de fútbol es corta. Mucha gente no sabe separar el fanatismo del trabajo, por más que hace años que estoy afuera, al querer estar en buenas competiciones, tengo que seguir afuera. Pero en vez de volver a Peñarol a los 35 o 36 años, ya liquidado, mi opción es volver a los 31. Hoy con 31 hay muchos... Zalayeta, por poner un ejemplo, anda volando".

Hablando sobre Uruguay y la selección, Cebolla confesó que le sorprendió la retirada de Forlán ("hizo mucho por la selección, de los profesionales que conozco en el fútbol es el más correcto") y que cuando no juega a fútbol, prefiere ver caballos, la verdadera pasión de su vida: "El fútbol me gusta, pero no soy fanático de sentarme a ver fútbol... prefiero hablar de caballos. Lo mío es la tradición, la campereada, la parcería, prueba de riendas, jineteadas...".