ESPANYOL 1 - CELTA 0

Caicedo vuelve a aparecer para darle el triunfo al Espanyol

El delantero ecuatoriano, como en Copa, entró en el 76' y marcó en el 89'. El Celta jugó a ráfagas, pero tuvo dos ocasiones claras de Larrivey y Orellana.

Lo había hecho todo bien el Espanyol ante el intermitente Celta, excepto atinar en los remates. Pero los pericos siempre se reservan un as en la manga, pues por algo son el Primera con más goles en el cuarto de hora final. Y esa carta últimamente se llama Caicedo, que entró en el 76’ para, como cinco días antes en la Copa, marcar el gol de la victoria. Lo suyo, no obstante, ya no es una carta, sino un repóker: ha marcado en sus últimos cinco partidos en el Power8. 23 puntos para el Espanyol al cierre de la primera vuelta y 21 para un Celta estancado, tras nueve jornadas sin ganar, y que aun así tuvo dos ocasiones clarísimas. 

Quiso aprovechar el Espanyol la inercia ganadora de la Copa, pues arrancó con empuje y en apenas 19 minutos había dispuesto de un par de llegadas claras, en sendos pases peligrosísimos de Sergio García y de Abraham que se pasearon ante la portería de Sergio Álvarez. Se hincharon a centrar los pericos, que —amén de explotar en esas acciones los laterales ‘anti-natura’ del Celta— son otro equipo desde que se midieron al Valencia, con mayor autoestima y más elaboración, capaces de ganar a cualquiera la batalla del mediocampo, donde se decantan los partidos. Y también mucho más fiables en defensa, en parte gracias a la reaparición de Héctor Moreno, quién sabe si fugaz porque Arsenal y Tottenham se plantean muy seriamente su fichaje. 

Así, la zaga perica, más sincronizada que la perica Gemma Mengual y cía en sus buenos tiempos, fue el terror en el primer tiempo de un Celta que incurrió hasta cuatro veces en el fuera de juego. Sólo lo sortearon los celestes en una ocasión, en el 36’, mediante un pase largo de Nolito a la espalda de los centrales que no supo resolver Larrivey. 

Tampoco a los seis de la reanudación acertó a marcar el argentino en primera instancia, ni Orellana después, en un contragolpe, la ocasión más clara hasta ese instante, precedida por un remate forzado de Stuani fuera a centro de Sergio. Los mismos protagonistas, Stuani y Larrivey, volvieron a tener el gol en el 65’. El charrúa cabeceó alto y el celeste, solo ante Casilla por otro genial pase de Nolito, remató a las manos del meta. Y no con las manos, sino con la punta de los dedos, desvió Sergio Álvarez un chut de Sergio García, tras combinar con el recién ingresado Caicedo. Fue la antesala del gol, con los mismos protagonistas con permiso de Abraham.

Lo más visto

Más noticias