REAL SOCIEDAD
Jagoba Arrasate busca más cambios para la final de mañana
El entrenador de Berriatua volverá a introducir novedades en el once inicial para conseguir la reacción del equipo txuri-urdin.
Jagoba Arrasate está ante la final de las finales para su futuro como técnico de la Real Sociedad. El técnico de Berriatua lo sabe, por las conversaciones que ha mantenido a lo largo de toda la semana con el presidente, Jokin Aperribay, y por las constantes noticias que han ido surgiendo sobre posibles contactos de la dirección deportiva con otros entrenadores. De hecho, el propio máximo mandatario realista le ha reconocido que el club está mirando entrenadores. Quizá por esa razón, Arrasate se ha afanado durante toda la semana en buscar nueva soluciones para reactivar a su equipo y lograr un triunfo que le permitir coger un poco de aire también en lo personal.
En ese sentido, el entrenador de Berriatua volverá a introducir mañana más novedades en su once inicial para conseguir la reacción de la Real. El problema es que se va a tratar de la enésima probatura en este arranque nefasto de temporada. Ya en Córdoba, la jornada pasada, volvió a hacer una minirevolución en la alineación con la entrada de Pardo, Chory Castro y Canales para ver si así podía conseguir corta la mala dinámica en la que está metida el conjunto txuri-urdin. No lo consiguió, porque aunque se logró un empate, la Real volvió a dar una imagen lamentable y no mostró ninguna personalidad. Para mañana tiene pensado cambiar de nuevo su sistema de juego. Del 4-4-2 con el famoso rombo se pasó al 4-2-3-1 clásico de las últimas temporadas de los éxitos más recientes, y mañana tiene intención de poner un 4-1-4-1 con un pivote único y cuatro centrocampistas por delante, con una única referencia arriba, que esta vez podría ser Agirretxe en lugar de Finnbogason. Markel Bergara es intocable, y la entrada de Zurutuza y Granero por delante tiene mucho cuerpo. Vela y Xabi Prieto comenzarían pegados a banda de inicio. En defensa, Mikel González podría ocupar el centro de la defensa con Iñigo Martínez, y no es descartable que Carlos Martínez vuelva al lateral derecho, para dar descanso a un Zaldua que acumula muchos minutos y parece estar acusando la presión de la élite, porque ha bajado algo su rendimiento.
Todas estas son posibilidades que Arrasate ha estado trabajando durante la semana. Estas y otras. Tiene claro que debe buscar una nueva solución ante el que puede ser su último partido al frente del banquillo de la Real. Porque es consciente de que su situación crítica ya no aguanta otra derrota más. Durante la semana se ha mostrado mucho más vehemente que en otras semanas, por lo menos en las sesiones a puerta cerrada. Se ha mostrado muy serio y activo en los entrenamientos, corrigiendo posiciones desde dentro de los partidillos y exigiendo más intensidad a sus jugadores. Ha hecho hincapié en los aspectos defensivos y ha trabajado la eficacia de cara a portería. Incluso la posesión de balón. Ha cambiado algunas pautas de entrenamiento y ha dado la sesión de querer hacer sesiones mucho más completas. Arrasate sabe que puede ser su última oportunidad de alargar su sueño de ser el primer entrenador de la Real.
Ni la victoria de mañana asegura a Arrasate su salvación
Con todo, por muchos cambios que haga mañana y por mucho que puedan servir para ganar al Málaga, su continuidad al frente de la Real no está ni mucho menos asegurada. Su crédito está prácticamente agotado y ni siquiera un triunfo contra el conjunto malacitano asegura su salvación. Jokin Aperribay le ha mantenido en el cargo a pesar del clamor popular en contra en las redes sociales, porque siempre ha sido un presidente paciente que nunca ha destituido a ningún, y no quiere que el primero se trate de su apuesta personal. Y también porque no ha encontrado el sustituto que encaje en el perfil que buscan para el banquillo del primer equipo de la Real Sociedad. Pero eso no quiere decir que por dar a Arrasate un margen de confianza de un partido más, o porque se hayan planteado darle un tregua hasta el parón liguero de noviembre, hayan parado de buscar. Todo lo contrario. La dirección deportiva ha seguido buscando en el mercado y si encuentran lo que buscan el domingo, aunque la Real haya ganado al Málaga, el club destituirá al entrenador de Berriatua y pondrá en el cargo al técnico elegido. Tanto es así que Aperribay ha viajado en las últimas horas a Inglaterra para reunirse con varios entrenadores que gustan a la secretaría técnica. Uno es David Moyes, el ex entrenador del Manchester United con el que han hablado desde la semana pasada, que dijo no a una primera propuesta, pero no se ha cerrado en banda del todo y hay una pequeña posibilidad. Pero puede haber otro entrenador que encaja en el perfil y con el que han podido reunirse. La dirección deportiva se nueve y por eso no puede asegurarse que una victoria salva a Arrasate. Puede darle otro pequeño margen, pero también puede no servirle como para llegar a la visita del Atlético de Madrid la siguiente jornada.