Javier Pastore: “Leo Messi nunca ha perdido su mejor versión”

Está siendo muy importante para Laurent Blanc en el arranque de la temporada. Fijo en el centro del campo del PSG, Javier Pastore espera poder tomar la revancha de hace dos temporadas cuando el Barça, apeó al equipo parisino antes de caer en semifinales contra el Bayern Múnich. Mañana volverá a cruzarse en el camino de su amigo Leo Messi, del que, pese a acumular muchas críticas la temporada pasada, Pastore nunca le vio bajar el pistón: “Leo nunca perdió su mejor versión. Pocos jugadores pueden mantener su ritmo y su tesón temporada tras temporada siempre haciendo goles y demostrando quién es el mejor”.

“El Barça es mucho más agresivo que en las últimas campañas. Evidentemente nosotros también querremos la posesión y en ese sentido el partido de mañana será muy peleado. Hay que saber que los dos equipos queremos jugar el balón y gobernar el centro del campo hará que la disputa sea tremenda. Creo que no esperaremos al Barça atrás como en el pasado para salir a la contra: buscaremos jugar siempre el balón”, analizó Pastore.

En el PSG preocupa la salud de Zlatan Ibrahimovic, que sigue arrastrando problemas en un tobillo. Tanto Blanc, entrenador del equipo francés, como el resto de su vestuario están atentos a cualquier novedad. “No sabemos si estará o no aún. Dependemos mucho de Ibra y tratamos de adaptarnos a su ausencia ya desde hace semanas. Somos conscientes de que hay mucha calidad en el bloque para relevarlo y el que asome en el ataque podrá hacer igual de bien. Tampoco estará Lavezzi (tiene una rotura fibrilar importante), por lo que Edison (Cavani), Lucas Moura o el que decida el entrenador, seguro que lo hará muy bien. Tuvimos un inicio de temporada algo irregular y eso lo seguimos notando aún”, opinó el argentino Pastore.

Mañana el medio, que hizo muy buena eliminatoria contra el Barça hace dos años, volverá a verse con Messi, al que le une una gran amistad. Como íntimo se alegra de que Leo esté enchufado, como rival, pese a los elogios, lo respeta, sí, pero también lo teme.