El presidente ejecutivo de Prisa, Juan Luis Cebrián , ha criticado la "repetida incapacidad" de las autoridades "para poner orden" en el mundo de los derechos de emisión del fútbol, lo que le ha llevado a cuestionarse "su voluntad política de hacer cumplir la ley en este terreno". Cebrián ha hecho estas afirmaciones durante la celebración de la Junta General de Accionistas de Prisa, en la que se ha referido a la "muy preocupante" situación del mercado cultural y de los medios de comunicación en España, marcada además por la irrupción de los grandes operadores de software y de telecomunicación que, a su juicio, está alterando los "tradicionales" modelos de negocio . "En medio de ese panorama -ha dicho- el IVA cultural al 21 por ciento es una agresión a los derechos morales de nuestra sociedad y a su capacidad de desarrollo en el futuro inmediato". Por ello, ha instado a los "gobernantes" a que "dejen de mirar para otro lado" y que adopten las medidas pertinentes "que defiendan los derechos de las empresas, los autores y los usuarios" en un entorno tan difícil para el futuro de la industria de los medios y cultural. Respecto a la piratería, Cebrián ha destacado que el Gobierno ha puesto en marcha una "encomiable" iniciativa legislativa para reforzar el reconocimiento de los derechos de propiedad intelectual en el nuevo entorno tecnológico, y ha confiado en que esa reforma garantice e impulse un modelo sostenible. "Deberá crear medidas eficaces de persecución contra la piratería digital de obras y creaciones , así como de las emisoras ilegales y de las emisiones y retransmisiones deportivas que vulneran descaradamente la norma", ha precisado. El consejero delegado de Prisa, Fernando Abril-Martorell , también se ha referido al negocio de los derechos del fútbol y a la situación de Canal +, la plataforma de pago de Prisa que "ni tiene un escenario de negocio fácil, ni su proceso de venta está siendo sencillo". "En Canal + los resultados de 2013 son malos", ha recalcado Abril-Martorell, que ha indicado que el deterioro del mercado ha impedido rentabilizar el esfuerzo inversor en el nuevo contrato de fútbol firmado a mediados de 2012; "y esto a pesar de los esfuerzos de contención del resto de los costes", ha agregado.