Bankia acepta ahora las reglas del juego de la Fundació VCF

El proceso de venta del Valencia ha vuelto a un cauce más o menos controlado. Tras el tsunami que propició la asamblea informativa convocada por el presidente Amadeo Salvo, anteayer se atenuó el fuego, tras la comparecencia del presidente de la Fundació VCF, y ayer se acabaron de apagar los rescoldos con la aceptación de Bankia a que el proceso se desarrolle por los cauces que dispuso el patronato de la Fundació el pasado martes.

Fuentes de la entidad bancaria aseguraron ayer a Efe que están “muy satisfechos” con la nueva postura que han tomado la Fundació y el club en el proceso de venta. E incluso llegaron a calificar de “gran noticia” el hecho que todas las partes vayan de la mano.

El razonamiento de Bankia es que hace ya muchos meses que comunicaron a los patronos de la Fundació, máxima accionista del club, que la mejor solución era la entrada de nuevos inversores. Y con la nueva aparición de Aurelio Martínez, el martes, las opiniones convergen. “Desde la llegada de los nuevos patronos, Bankia siempre les comunicó que la venta a un inversor suficientemente cualificado y solvente que aportase un proyecto social, deportivo y económico viable era la mejor opción”, comentó el portavoz de Bankia.

Postiga se va cedido al Lazio

En el día de ayer se avanzó bastante en las salidas que necesita cerrar el Valencia. Por un lado, está cerrada la cesión de Helder Postiga al Lazio a expensas de que pase el reconocimiento médico en Roma, posiblemente hoy mismo. El equipo romano se haría cargo de la ficha del futbolista y se guardaría una opción de compra por 3,5 millones. Por su parte, la Real Sociedad insiste por Canales y llegaría hasta los cinco millones por el traspaso. Las posturas cambiaron anoche. Ahora es el Valencia quien quiere vender y Canales quien quiere quedarse.