La Roca Sánchez quiere frenar a una Real de Champions League

La última vez que la Real pisó el Martínez Valero fue en la temporada 2009-10. Una jornada antes de aterrizar en Elche, ascendió a Primera. El conjunto txuri urdin se despidió de Segunda encajando una goleada. Jorge Molina, pichichi aquel año, le endosó el solito cuatro dianas. Aquello quedó en anécdota porque la Real ya había cumplido su objetivo. Desde entonces, su carrera ha sido meteórica, hasta el punto de acariciar la fase de grupos de la Champions en poco más de tres años. El sueño de cualquiera.

La Real viene de maravillar con su juego y de poner a sus pies Gerland, antes territorio prohibido para muchos por culpa de su dueño, el Olympique de Lyon. Los golazos de Griezmann y Seferovic aún permanecen en la retina de muchos. Pero la Real tiene que aparcar hoy la Champions para centrarse en la competición doméstica. En su cuento de hadas se cuela el Elche. Es probable que a motivación e ilusión el conjunto de Escribá ponga en más aprietos a la Real que el propio Olympique.

El Elche se juega esta tarde la vida. La mala imagen ofrecida ante el Rayo y el hecho de presentarse en un Martínez Valero hambriento de Primera obliga a la reacción. Para empezar, Escribá va a levantar un muro en su medular con Carlos La Roca Sánchez y Javi Márquez. El técnico quiere destruir y ser dueño del juego. Además, la otra novedad puede estar en la banda izquierda, donde Albacar y Fidel esperan su oportunidad. La Real, como los equipos grandes, rotará, pensando en la vuelta de Champions del miércoles. Griezmann se ha quedado en casa, pero Seferovic y Granero todavía tienen ganas de marcha.