El Huesca logra un trabajado triunfo ante el Albacete

El Huesca consiguió una importante y trabajada victoria, la segunda en casa en la primera vuelta, ante un rival directo como el Albacete, que plantó cara en la primera media hora de la segunda mitad con varias ocasiones muy claras para haber igualado la contienda pero que no supo materializar.

El Huesca salió más decidido que su rival a por el partido, lo que le permitió ejercer un dominio territorial, pero aunque llegó con cierta asiduidad al área manchega no dispuso de ocasiones claras.

El Albacete, sin jugar excesivamente defensivo, sí que acumuló muchos jugadores en el centro del campo con el fin de taponar a los oscenses las vías de acceso a su área.

El mayor peligro de ambos equipos llegó en disparos desde lejos, destacando uno de Gluscevic, que salió ligeramente alto, mientras que en el 28 fue Roberto el que lanzó flojo a las manos del meta visitante Navas.

El gol, que a la postre sería el de la victoria local, llegó en el minuto 38 en una jugada rápida de los propietarios del terreno con un primer remate de Roberto que rechazó el cancerbero Navas y que recogió el propio delantero del conjunto oscense para ceder a Camacho, que batió de disparo raso al meta visitante.

En la segunda parte el Albacete salió más metido en el partido que su rival y dispuso de varias ocasiones muy claras en los primeros minutos.

Gluscevic, en el minuto 50, no acertó casi en la raya de gol a empujar el balón. Asen dispuso de dos, la primera en el 51, cuando intentó una vaselina que el meta Andrés paró bien, y la segunda en el 59, en la que, sólo ante la meta oscense y sin portero, se hizo un lío con el balón y se lo dejó arrebatar por Molinero y finalmente en el 65 el que falló fue De Lerma que, también solo, envió fuera.

Poco a poco fue despertando el Huesca gracias a la entrada de Sorribas, que dio más equilibrio al juego, y el agobio de los manchegos desapareció.

El equipo de Onésimo Sánchez supo controlar el partido e incluso pudo haber sentenciado en el minuto 78 con un remate de cabeza de Helguera que salió lamiendo el poste derecho de la portería de Navas.