Menezes: "Brasil tiene que trabajar más para jugar como España"

El nuevo seleccionador brasileño de fútbol, Mano Menezes, ha asegurado que el equipo de España fue el único que desplegó un juego ofensivo en el Mundial de Sudáfrica y reconoció que la Canarinha tiene que seguir trabajando para jugar de ese modo, en una entrevista difundida hoy.

"La gran mayoría de las selecciones jugó al contraataque en la Copa. Hasta Alemania, que me gustó mucho, jugó al contraataque. La excepción fue España, que era un equipo que trabajaba la posesión del balón en el campo del adversario y que cuando la perdía hacía presión para recuperarla", dijo Menezes en una entrevista concedida al rotativo Folha de Sao Paulo.

Según el entrenador, hay varios factores que contribuyen a la personalidad de la selección española, entre los que citó el modelo del Barcelona, y reconoció que Brasil debe seguir trabajando para forjar una selección de esas características.

"Nosotros no conseguimos eso porque queramos. No basta con buena intención. España llegó a ese punto después de mucho tiempo, con la confirmación de la Eurocopa. También trajo la base del Barcelona. Nosotros todavía no tenemos la base de un equipo brasileño así", agregó.

Para Menezes, ex entrenador del Corinthians brasileño, el club de fútbol Santos es el único que se ha acercado a la estrategia de ataque dentro de Brasil, aunque en su opinión "desgraciadamente empieza ya a decepcionar".

"Necesitamos tener más sustento para jugar así y acercarnos a la victoria", apostilló Menezes. El seleccionador, que fue nombrado por la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF) hace apenas dos semanas, reveló que interactúa con todas las instituciones "antes de proponer cualquier alteración" en la forma de trabajo.

"Justamente para no llegar con aquella arrogancia. Llega, quiere todo nuevo, destruye todo como si uno fuera el único en saber como funciona", afirmó.

Menezes fue colocado al frente de la Canarinha después del Mundial de Sudáfrica, torneo en el que Brasil cayó en los cuartos de final frente a Holanda.

El seleccionador ha sustituido en el cargo al polémico Dunga, cuyas airadas reacciones ante la prensa y la afición le granjearon abundantes críticas.

La Justicia brasileña condenó ayer a la CBF a pagar una indemnización de 20.400 reales (unos 11.597 dólares) por considerar que Dunga ofendió a dos hinchas durante un partido contra Chile de la fase eliminatoria del Mundial.