SUDÁFRICA 2010 | BRASIL

Kaká se entrena con el grupo en la última sesión de Brasil antes de viajar

Kaká, jugador del Real Madrid, llegó con molestias físicas de España y su participación en los entrenamientos era esperada con expectativa por la afición y los medios brasileños.

El centrocampista Kaká y un radiante sol aparecieron hoy, después de cuatro días de espera, en el último entrenamiento de campo de la selección brasileña de fútbol que mañana viajará a Johannesburgo para el Mundial de Sudáfrica.

La presencia de los dos astros por primera vez en los entrenamientos colectivos marcó el último ensayo del equipo dirigido por Dunga en la ciudad de Curitiba, en el sur del país. Kaká, jugador del Real Madrid, y Luis Fabiano, artillero del Sevilla, llegaron con molestias físicas de España y su participación en los entrenamientos era esperada con expectativa por la afición y los medios brasileños.

Después de pasar por exámenes físicos, ambos fueron autorizados en la noche del domingo por el cuerpo médico de la selección para unirse a los trabajos normales del grupo. Luis Fabiano entrenó ayer sin problemas y en la mañana de hoy se movió con confianza durante el primer y único entrenamiento con balón, mientras que Kaká hizo el lunes y durante la jornada matutina del martes un trabajo de acondicionamiento físico separado del resto de la plantilla.

Unas 2.500 personas se congregaron hoy en las afueras del Centro de Entrenamiento Cajú con la esperanza de que Dunga volviera autorizar la entrada del público, como ocurrió el lunes por la tarde, pero no tuvieron la misma suerte.

Los aficionados, decepcionados porque no se les permitió el acceso al complejo deportivo del club Atlético Paranaense, gritaron consignas contra Dunga y algunos, los más irritados, lanzaron vivas a Argentina, el tradicional rival de Brasil. Sin embargo, algunos jugadores, custodiados de cerca por agentes de la policía, fueron hasta el portón del complejo y saludaron a los aficionados que estaban en la primera línea de las barreras de seguridad.

Robinho y Kaká, los principales ídolos de la selección, encabezaron el grupo y fueron los más aclamados por los aficionados, que no pararon de gritar los cánticos tradicionales de animación del fútbol brasileño. Los que sí pudieron conversar con los convocados por Dunga fueron varios campeones mundiales que hoy visitaron la sede de la concentración, según la Confederación Brasileña de Fútbol (CBF).

Entre los visitantes ilustres estuvieron Cafú, Marcio Santos, Pepé y Félix, el portero de la selección tricampeona del mundo en el Mundial de México 70. Otra novedad hoy en la selección fue la llegada del portero Julio César, del Inter de Milán, quien de inmediato fue sometido a los exámenes médicos de rutina y mañana embarcará con el grupo para Brasilia, donde recibirán la bandera nacional de manos del presidente Luiz Inácio Lula da Silva.

La selección brasileña emprenderá mañana mismo desde Brasilia el viaje a Johannesburgo, donde se unirán Lucio y Maicon, jugadores campeones de Europa con el Inter de Milán y que, al igual que Julio César, habían sido autorizados para trasladarse directamente hasta Sudáfrica.

De otro lado, la CBF confirmó un primer partido amistoso en territorio africano, que será el 7 de junio en Dar es Salaam (Tanzania), con la selección de ese país. El otro rival para el último partido de fogueo antes del debut mundialista ante Corea del Norte, el 15 de junio, posiblemente sea la selección de Zimbabue, con la que se gestionan detalles para confirmar el encuentro, apuntó la CBF.

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