"Es un partido para saber madurarlo y estar serenos"

Importante sí, trascendente no. Lucas Alcaraz no quiere oír hablar aún de finales. El entrenador no es ajeno a que, con 29 puntos, la visita del Valladolid puede marcar un punto de inflexión muy importante en la trayectoria ascendente del equipo hacia la permanencia, aunque prefiere medir muy bien los pasos para no dar ninguno en falso y volver a asomarse al precipicio. La imprevisibilidad del Valladolid, capaz de lo mejor y de lo peor, hace que el granadino prefiera tirar de cautela. "Es un partido para saber marcar los tiempos, para saber madurarlo, para no perder la serenidad porque se puede pasar por muchas situaciones durante los 90 minutos y el equipo tiene que demostrar su madurez", advirtió Alcaraz, quien no quiere que la trascendencia con que empieza a decorarse el Nuevo Colombino acabe pasando factura. "Lo que es trascendente te lo da el paso del tiempo. Tengo las mismas sensaciones a nivel deportivo que la semana pasada, de que es importante, de que es un rival difícil; es decir la sensación de importancia es la misma, no tiene por que ser trascendente", puntualizó el técnico, para quien "sí es más importante porque se juega esta semana, porque es inmediato"".

A sus precauciones contribuye también el propio Valladolid, frente al que debutó en la primera vuelta en su segunda etapa al frente del Recre: "Es un equipo al que es difícil de jugar porque te exige mucho, pisa el campo contrario, es capaz de hacer resultados brillantes y eso está relacionado con su forma de jugar". En cuanto a la importancia de la doble C, el tándem Camuñas-Colunga, el técnico apuntó que "es un recurso periodístico pero ningún equipo depende de un jugador, depende de todos; hay algunos que nos dan argumentos muy importantes pero hay otros que también nos dan esos argumentos u otros diferentes pero igualmente importantes"

Agradece las muestras de afecto

El técnico ha vivido una de las semanas más duras desde que regresó al Decano el pasado mes de octubre. El motivo ha sido el fallecimiento de su suegro, Miguel Prieto García. Durante estos días, el entrenador ha recibido innumerables muestras de apoyo, tanto del propio club, de la plantilla como de la sociedad onubense, por lo que ayer agradeció públicamente tantos gestos de afecto.