Primera | Barcelona 5 - Levante 1

El Barça fue mucho Goliat

El Barça se pone a dos puntos del Real Madrid a la espera de lo que ocurra en el Bernabéu. Messi volvió a ofrecer una exhibición, anotando y asistiendo. Eto'o anotó un hat-trick en su vuelta al Camp Nou. El Levante plantó cara sólo en la primera mitad.

ESPLÉNDIDO. Lionel Messi volvió a marcar las diferencias en el Barcelona.Reuters

El barcelona mete presión al Madrid. Los de la ciudad condal no han exhibido el nivel de juego de Glasgow, ni falta que les ha hecho, para imponerse holgadamente ante un más que digno Levante. Comandados por la figura de un genial Messi, los barcelonistas se ponen a dos puntos del líder sin apenas forzar la máquina, permitiéndose incluso sufrir en determinados momentos del encuentro y gustándose al final.

El Barcelona salió al césped del Camp Nou dormido, excesivamente relajado, quizás por la confianza ciega en su victoria ante el colista del campeonato. Su exhibición días atrás en Glasgow (lo fue, aunque algunos no lo quieran ver) y la supuesta vuelta de un buen, que no el mejor Ronaldinho, hacían pensar en una tarde plácida para el público 'culé'.

El Levante, ejemplo de honradez, profesionalidad y amor al fútbol, no era el mejor rival para ofrecer facilidades. Los levantinistas, en parte por la situación que atraviesa la plantilla, en parte por el buen estado de forma que vienen atravesando, son un equipo con un hambre letal, como si quisieran demostrar descargar en el campo, y a través del fútbol, toda la rabia e impotencia que llevan dentro en estos momentos.

Los de De Blasi, conscientes de su inferioridad técnica, tenían que equilibrar la balanza con otras armas. La concentración, la intensidad y la fuerza, si eso no bastaba estaban perdidos. El Barcelona es un equipo que por su propia inercia, por su filosofía de ser, no conoce otra forma de jugar que no sea al ataque, mirando el marco contrario, de modo que sales al césped del coliseo blaugrana sabiendo que lo pasarás mal, independientemente de que el juego sea mejor o peor.

Y los visitantes, que tenían la lección más que aprendida, comenzaron a sufrir pronto. A los 13 minutos, cuando no había dado tiempo a que el Barça era aún un sonámbulo al que no había dado tiempo a despertar, Xavi aprovecha un rechace al borde del área para adelantar a los locales. El Levante había salido a tratar de aguantar el cero a cero, al menos en la primera parte, y se veía por detrás a las primeras de cambio.

El gol hubiera hundido a cualquier equipo que llegara como último clasificado al Camp Nou, pero las circunstancias especiales del Levante hicieron posible que los de Rijkaard se vieran completamente sorprendidos en los minutos posteriores al tanto. Comandados por Riga y un gran Juanma, los levantinistas comenzaron a impacientar al respetable ganándole metros poco a poco al infortunio. El pacense incluso protagonizó la jugada del encuentro, con un regate al más puro estilo 'Mágico' González, que hubiera sido el gol de la jornada de no haberse entrometido los dedos de Víctor Valdés y se estrellaba en el poste. El guardameta blaugrana volvía a hacer alarde de su gran momento de forma y llamando a las puertas de la selección.

La reacción granota ya era una sorpresa, se esperaba de inmediato el despertar barcelonista, pero la conmoción absoluta llegó con el empate visitante al transformar Riga un penalti absurdamente cometido por Zambrotta. El italiano, que posteriormente sería pitado hasta el descanso, toca el balón con la mano con Velasco Carballo viendo la jugada en primer plano.

El resultado era ya una victoria para los valencianos. Ni el más optimista de sus aficionados hubiera apostado por ello tras ver como se había puesto el encuentro, pero la alegría dura muy poco en casa del pobre, exactamente 3 minutos, lo que tardó Lionel Messi en volver a sacar las castañas del fuego a su equipo. El argentino se alió con Xavi, que le devolvió de tacón una pared en el pico del área para que soltara un latigazo ante el que nada pudo hacer Kujovic. De nuevo, como al comienzo, al Barça, sin hacer prácticamente nada, le sobraba la extraordinaria calidad de sus hombres arriba para resolver.

Dos chispazos, y se acabó

Tras el paso por vestuarios, y tras unos minutos en lo que el Levante apuntó una cierta reacción, todo se desvaneció. Demasiado había hecho ya levantándose una vez. La idea era que lo mismo da perder por uno que por tres, pero hay momentos en lo que es mejor quedarse en el suelo, y pronto lo descubrió.

El Barcelona mataba el encuentro a los 11 minutos, y de nuevo gracias a la enorme calida de sus hombres, y de nuevo gracias a Messi, esta vez asociado con Eto'o. Andaba el camerunés ansioso desde su llegada de la Copa de África, a la que se había marchado dejando un buen sabor de boca tras su lesión, y pronto vio saciada su necesidad de ver puerta. Pocos minutos después, por si quedaba ya alguna duda, el encuentro quedó finiquitado con el segundo del '9', también a pase de Messi, que volvía a ser el mejor de su equipo y completaba un encuentro sublime.

Todo lo contrario que Ronaldinho, que volvió a sembrar muchas dudas. A pesar del buen comienzo del brasileño, su fútbol se fue disipando con el paso de los minutos, al tiempo que su físico iba decayendo. En cualquier caso, el otrora 'crack' fue despedido con ovación por un Camp Nou que sigue teniendo fe en su total recuperación.

El cuarto tanto local supuso la tregua mutua, el fin de las hostilidades. Ambos equipos se relajaron y sólo la entrada de Bojan y Giovani, que no querían desperdiciar ni uno de los minutos concedidos por Rijkaard, le ponía un poco de picante al Barça arriba, y precisamente una incursión de Bojan por la derecha terminó en el tercero de Eto'o, que casi sin querer empujó el balón a la red cuando quería controlar.

Cinco goles que son un excesivo castigo para un equipo que se mostró valiente en un feudo como el azulgrana, pero que sirven para que el Barcelona presione al Madrid, situándose a dos puntos del conjunto merengue a falta de que éste dispute su encuentro ante el Getafe.

Lo más visto

Más noticias