Eurocopa 2004 | Portugal
Scolari: "Dejen en paz a Figo; necesitamos calma"
Niega que haya un enfrentamiento entre los dos
Luiz Felipe Scolari compareció ayer por propia voluntad para rogar a los periodistas, sobre todo a los portugueses, que dejen en paz a Figo y que no busquen ningún enfrentamiento entre ambos porque no lo hay, según afirma el seleccionador luso. Figo defiende a su selección y a su país, ayuda a los más necesitados... No es justo lo que algunos están intentando hacer con él, declaró.
Scolari sustituyó a Figo en el minuto 74 del partido con Inglaterra. El madridista, enfadado, se fue al vestuario directamente y ni siquiera siguió desde el campo la tanda de penaltis. Cada uno es como es. Hay gente extravertida y gente reservada. Figo es de estos últimos. No abre su vida a nadie, no le gusta exteriorizar sus sentimientos. Es lógico que no le gustara el cambio. A nadie le gusta que le cambien, ni siquiera en un partido de solteros contra casados. Pero en el vestuario, tras la victoria, estaba más feliz que nadie y lo celebraba como el primero, manifestó el técnico.
Ruego. Scolari prosiguió con su petición a los periodistas que cubren la información diaria de la selección portuguesa: Les pido de corazón que dejen este asunto de una vez, porque de lo contrario van a romper el gran ambiente que se respira en este equipo. Figo es un ídolo nacional. Siempre ha sido un ejemplo como futbolista y como persona. La situación cuando fue sustituido no fue la misma que hubo luego en el vestuario. Si yo les merezco un poco de confianza, les ruego que nos dejen trabajar tranquilos para preparar los próximos partidos que nos esperan en la Eurocopa.
"No hay motivo para negociar ahora mismo mi renovación"
Scolari no piensa por ahora en renovar su contrato como seleccionador portugués: Digo lo que dije antes de empezar la Eurocopa, que hablaremos de este asunto cuando finalice el torneo. No creo que haya motivos para que cambie de opinión ahora. Yo no tengo problemas con la Federación y si la Federación quiere se cerrará todo en cuestión de minutos. Es más, ni siquiera nos tenemos que reunir: basta que hablemos un momento por teléfono cuando acabe todo esto. Scolari no oculta su preocupación por la euforia que se ha desatado en Portugal: "Me gusta que la gente esté contenta, pero hay que tener un poco de calma, porque aún no hemos ganado nada".