Fue el último en llegar la pasada temporada, casi cuando las puertas ya estaban cerradas. El piloto francés se subió al tiovivo de la Fórmula 2013 en pleno test de pretemporada en Montmeló. El dinero le abrió las puertas del equipo Marussia: para ser exactos, el dinero que parecía garantizar Luiz Razia y que finalmente no llegó a la cuenta corriente del equipo anglo-ruso. Eso hizo que el brasileño se tuviera que bajar del proyecto y que Bianchi fuera finalmente el compañero de Max Chilton para la temporada 2013 donde ninguno de los dos novatos puntuó, como es normal debido al rendimiento del coche, pero el galo supero en mejores posicines tanto en parrilla como en carrera al británico.

Bianchi procede de la cantera de Ferrari, de ahí que algunos lean su fichaje como un modo de que Marussia se asegure motores de la Scuderia para el Mundial de 2014, el del regreso de los turbo a la parrilla. Jules, una de las perlas de la Ferrari Driver Academy, fue piloto reserva de Force India en 2012. Campeón de la Fórmula Renault 2.0, en 2008 se hizo con la victoria en el prestigioso Masters de Zolder de la F-3. Un año después conquistó el título de la F-3 Euroseries y dio el salto a la GP2, donde ha sido tercero en las ediciones de 2010 y 2011. En 2012 fue subcampeón de las World Series 3.5 tras librar un emocionante duelo con el holandés Robin Frijns. Durante la pretemporada 2013 luchó con Adrian Sutil por un volante en Force India, que al final fue para el alemán.

Jules, nieto de Mauro Bianchi, tres veces campeón del mundo en GT, y sobrino nieto de Lucien, que ganó las 24 Horas de Le Mans en 1968 con el mexicano Pedro Rodríguez en un Ford GT40 y disputó 17 grandes premios en Fórmula 1 entre 1960 y 1968. Su gran hito fue un podio en Mónaco en 1968, un circuito histórico en el que ahora será el joven Jules quien intente defender el honor familiar.