Todos hemos tenido que dejar algo en un control de aeropuerto. Mínimo la botella de agua que se nos ha olvidado en la mochila, o el cortauñas que pensábamos que nos iban a dejar pasar en la maleta de mano.

¿Qué se hace con todo eso? En la mayoría de casos se destruye o se envía a reciclaje, pero antes de eso, el aeropuerto de Vilnius en Lituania está celebrando las vacaciones de la forma en que solo un aeropuerto puede hacerlo.

Su árbol está adornado con artículos confiscados a los pasajeros durante el control de seguridad, según ha explicado Marius Zelenius, Jefe de Comunicación de los Aeropuertos de Lituania, a la BBC.

Cuchillos, mecheros y tijeras toman el lugar de adornos, luces y cintas. Un trabajo que les ha llevado más de dos semanas de trabajo a los operarios, y que ahora luce justo en el control para recordar a los pasajeros qué no pueden llevar.

"Con este árbol de Navidad queremos captar la atención y mostrar qué tipo de cosas están prohibidas en un avión", comentan desde el aeropuerto.