En octubre del 2000 se estrenaba CSI: Las Vegas, una serie que marcaría un antes y un después en el género de los dramas policíacos, y que daría lugar a varios proyectos anexos donde se retrataba la labor de otros CSIs en ciudades como Miami o Nueva York.

La serie original duró hasta 2015, con una película final incluida, y ese equipo primigenio estaba dirigido por un jefe algo distante pero muy inteligente llamado Gil Grissom, interpretado por el actor William Petersen.

Grissom pronto se convirtió en el personaje principal de una serie de un marcado carácter coral. Sin embargo, en 2009, durante la novena temporada, Grissom decide dar un paso al lado y abandona el equipo -y con ello la serie-, a lo que no obstante ha vuelto en forma de pequeños cameos y para la película especial de 2015.

¿Pero qué fue durante todo este tiempo del actor que lo interpretaba? William Petersen, (Illinois, 1953), fue el actor que le dio vida, y que ha quedado marcado por el personaje también de un modo u otro.

Petersen comenzó a formarse en el teatro en el País Vasco 

Curiosamente Petersen se interesó en su juventud por España y en concreto por la cultura vasca, donde viajó siguiendo a un profesor de teatro y comenzó a formarse de cara a las tablas. En Mondragón, de hecho, nacería su primera hija, a la que puso de nombre Maite Nerea. Con el tiempo, Petersen decidió volver a Estados Unidos para intentar encontrar papeles como actor.

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Allí lograría sus primeros papeles. Su debut en el cine se produjo con un pequeño papel en 1981, en la película Thief de Michael Mann. Después, en 1986 obtuvo uno de sus mayores éxitos con la película Manhunter, del mismo director, y donde hacía del agente que persigue a Hannibal Lecter en la primera película que adaptó esta historia al cine antes del conocido papel de Anthony Hopkins.

Durante los 90 fue hilando películas, muchas de ellas de corte menor, mientras compaginaba esto con el teatro. Su papel más importante de estos años quizá sea en The Rat Pack (1998), junto con Ray Liotta, donde interpreta al presidente Kennedy.

A continuación llegaría el éxito con CSI, que tras abandonar en 2009, le devolvió el tiempo para su mayor pasión: el teatro, y en concreto interpretar obras de Shakespeare y pequeñas producciones intimistas. “CSI me dio la oportunidad de comprarme una casa enorme. Me olvidé de uno de los principales problemas de la carrera de actor, que estar siempre pendiente de qué será lo próximo. Aquí estabas en el mismo sitio cada día, podías dormir tranquilo por las noches”, contaba en 2016 en una entrevista con El País.

Desde 2017 Petersen se ha estado centrando en la obra ‘Minutes’, donde se cuenta una trama de un ayuntamiento norteamericano y que ha recibido una nominación a los Pulitzer de teatro.