Novedades en el 'caso Alcàsser'
La Asociación Laxshmi ha pedido nuevos análisis genéticos de una sábana, dos trozos de carrocería y madera, varias fibras de un colchón y la moqueta.
El crimen de las niñas de Alcàsser ocurrió en 1992, pero a día de hoy sigue siendo uno de los casos más importantes y mediáticos de la criminología española. La acusación popular que ejerce la Asociación Laxshmi, para la Lucha contra el Crimen y la Prevención, ha exigido que se realicen nuevos análisis de ADN en ropa de las niñas y otros restos encontrados en varios escenarios estrechamente vinculados con este suceso.
Y es que esta acusación popular al magistrado David Cabrera para que autorice nuevas pruebas de ADN es necesaria para "corroborar la participación del fugado Antonio Anglés" en el triple crimen y "esclarecer las circunstancias que rodearon" el caso.
Nuevos análisis genéticos
El criminólogo y responsable de la Asociación Laxshmi, Félix Ríos, ha presentado nuevos informes al Juzgado de Instrucción número 6 de Alzira, el responsable de la investigación, en el que reclama que el Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses trate de encontrar ADN de diversas muestras.
Más concretamente, ha pedido nuevos análisis genéticos de tres prendas de las víctimas: una sábana que cubría un colchón de espuma en la caseta de La Romana, dos trozos de carrocería y madera, varias fibras de un colchón y la moqueta que envolvía los cadáveres de las niñas.
Probabilidad de encontrar ADN donde no se pudo en los años 90
Según Félix Ríos, "encontrar ADN de Anglés y de las víctimas en las cubiertas de los colchones serviría para situar una posible actividad sexual en la caseta, hallarlo en las ropas de las víctimas o la moqueta demostraría la actividad sexual con ellas, y encontrar sangre de las niñas en el coche o la caseta las situaría allí con certeza".
Este, en los nuevos informes presentados, ha presentado uno realizado por un experto en genética forense, acerca de la viabilidad de las nuevas pruebas de ADN que el magistrado está valorando. Es más, el director técnico del Laboratorio de Genética Forense del Instituto de Medicina Legal de Las Palmas, José Juan Pestano, ha asegurado que en su informe sostiene que las técnicas genéticas de amplificación actuales "pueden permitir encontrar ADN en pruebas de convicción donde no se pudo obtener en los años 90".
Algunas de esas muestras, según han explicado esta acusación, dieron positivo en los años 90 en pruebas orientadores sobre semen o sangre, "pero no dieron confirmación en pruebas posteriores o no se practicaron por falta de tiempo, ni se obtuvo ADN, posiblemente por la baja sensibilidad de las pruebas y tecnología de ADN de la época".
29 años del caso
El pasado enero se cumplieron 29 años del hallazgo de los cadáveres de Miriam, Desirée y Toñi, las chicas de entre 14 y 15 años que habían desaparecido dos meses antes. Las tres jóvenes fueron encontradas por dos apicultores que las hallaron semienterradas en un paraje cercano al pantano de Tous.
La sentencia dictada en septiembre del año 1977 por la Audiencia de Valencia dictó que "Miguel Ricart, en compañía de otro varón identificado y que no se encuentra a disposición del Tribunal (haciendo referencia a Antonio Anglés), y posiblemente de alguna otra persona más" secuestraron a las tres adolescentes para satisfacer sus deseos sexuales.