Qué es deflactar el IRPF, la medida de Ayuso contra la inflación: ¿cómo afecta al salario?
El Gobierno madrileño de Isabel Díaz Ayuso anunció este lunes la deflactación del Impuesto de la Renta sobre las Personas Físicas “para contrarrestar” la subida de los precios.
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, anunció este lunes que el Gobierno regional adecuará el tramo autonómico del Impuesto de la Renta sobre las Personas Físicas (IRPF) a la inflación para que los trabajadores no pierdan poder adquisitivo con el objetivo de que entre en vigor en enero de 2023.
"De manera que, si una familia ingresa más ese año, su tramo de renta será ajustado para que siga pagando los mismos impuestos y no pierda su poder adquisitivo por culpa de la inflación", ha detallado. La Presidenta de la Comunidad ha remarcado que la situación económica actual está “provocando por primera vez que la clase media española no pueda llegar a fin de mes ni siquiera teniendo un empleo”.
Esta rebaja, calculan desde el Ejecutivo regional, supondrá un ahorro de 334 millones a los contribuyentes: “Madrid se consolida como la región con los tipos más reducidos del impuesto, situándose en un 8,5% el más bajo y un 20,5% el más elevado”.
Esta medida, que ha adelantado Ayuso durante la intervención en el desayuno informativo organizado por El Debate, se encuadra dentro de las propuestas presentadas por el actual líder del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo. La presidenta de Madrid ha hecho hincapié en que, en su opinión, esta decisión “se une al modelo económico que tanto ha beneficiado a Madrid en las últimas dos décadas”.
¿Qué es deflactar el IRPF?
Esta medida económica, que puede aplicarse tanto a nivel estatal como a nivel autonómico, busca que los impuestos directos progresivos como el IRPF permitan mantener su capacidad económica al contribuyente en un contexto de inflación. Un alza de los precios puede suponer un incremento de los salarios, que no siempre tiene que ir acompañado de un mayor poder adquisitivo.
Por ejemplo, un trabajador que disfrute de una subida salarial por el actual contexto inflacionista podría pasar a tributar en el siguiente tramo del IRPF. Esto incluso podría no sólo no ser beneficioso, sino que mermaría su capacidad económica. El concepto de deflactación del IRPF supone adaptar los márgenes de los tipos de este impuesto a la actual situación inflacionista. Es decir, no sería una bajada de impuestos, pero vendría a aliviar los bolsillos de los contribuyentes.
El presidente del Consejo General de Economistas de España (CGE), Valentín Pich, indicó en abril pasado que es "razonable" tener en cuenta la subida nominal de rentas y la inflación en un impuesto progresivo como el Impuesto sobre la Renta. Según los cálculos del CGE, los contribuyentes podrían ahorrar entre 9 y 136 euros en IRPF si las tarifas se ajustan un 1,5%. El ahorro podría ser aún mayor, de entre 109 y 263 euros, si además de la tarifa también se ajustan a la inflación -en este caso, al 6,5%- otros componentes del IRPF.