Finlandia y Suecia estarían planeando solicitar el ingreso para entrar a la Alianza Atlántica el próximo mes de junio, después de que se celebrase la semana pasada un encuentro entre los titulares de Exteriores de los países miembros de la OTAN y los de ambos países nórdicos, según ha informado el diario británico The Times.

Funcionarios de ambos países habrían señalado el "gran error estratégico" de Rusia con la invasión de Ucrania, pues en estos momentos Finlandia y Suecia "están listas para unirse a la OTAN en verano". Washington confía en esta medida, que haría sumar a la Alianza Atlántica dos nuevos miembros, pasando así de 30 a 32 países, según el medio citado. Además, Estados Unidos habría remarcado que este cambio de postura de los países nórdicos se trata de "una consecuencia directa" de la guerra en Ucrania.

El Kremlin se ha mostrado siempre muy crítico y reacio a que los países nórdicos, muy cercanos a sus fronteras, se adhieran a la OTAN. Moscú amenaza regularmente a Finlandia y Suecia con "graves consecuencias políticas y militares" si se une a la Alianza, una advertencia que se ha repetido en las últimas semanas. De hecho, para poner fin a la guerra, Rusia explicó que es necesario que Ucrania abandone sus aspiraciones de pertenecer a la OTAN, algo a lo que ya cedió el presidente Volodimir Zelenski: "Nos hemos dado cuenta de que Ucrania no será miembro de la OTAN", explicó el pasado 15 de marzo.

Respuesta de Rusia

La respuesta del Kremlin, como era de esperar, no ha tardado. El portavoz de la Presidencia, Dmitri Peskov, ofreció los detalles de cómo afectaría su unión a la OTAN. "Hemos dicho en reiteradas ocasiones que la alianza en sí misma es más bien una herramienta para la confrontación. No es una alianza que garantice la paz y la estabilidad, y su mayor ampliación, por supuesto, no traerá seguridad adicional al continente europeo".

El deseo de ingresar en la OTAN se duplica en Finlandia

La membresía de la OTAN para Finlandia y Suecia fue un tema de conversación y múltiples sesiones durante las conversaciones que los ministros de Exteriores de la Alianza Atlántica tuvieron la semana pasada, donde participaron los dos países del norte de Europa, según ha sostenido un funcionario estadounidense al diario británico. Según el exprimer ministro finlandés Alexander Stubb, la solicitud de su país “se presentará en algún momento de mayo" para que la OTAN tome una decisión en la cumbre que se celebra en Madrid a finales de junio. Según Pekka Haavisto, ministro de Relaciones Exteriores finlandés, la OTAN tardaría entre cuatro y doce meses en oficializar la adhesión de su país.

En todo caso, al igual que su vecina Suecia, Finlandia ha obtenido claras garantías del Secretario General de la OTAN, Jens Stoltenberg, de que la puerta está abierta y ha recogido numerosas muestras de apoyo, desde Estados Unidos hasta Alemania, pasando por Francia y el Reino Unido. Los ciudadanos están de acuerdo con el ingreso: según encuestas citadas por AFP, un 60% de los finlandeses está a favor de la adhesión, el doble que antes de la guerra de Ucrania. No obstante, en caso de producirse, la solicitud de Finlandia debería ser ratificada por todos y cada uno de los 30 países miembros de la OTAN, por lo que el Ejecutivo finlandés está tanteando de antemano si cuenta con la unanimidad necesaria.

Una de las grandes preocupaciones de Finlandia antes de dar este paso es garantizarse la seguridad por parte de la OTAN en el intervalo de tiempo entre la presentación de la solicitud de ingreso y la ratificación de los países. En dicho periodo no estaría cubierta por el artículo 5 de la Alianza, que establece la defensa colectiva si un país miembro es atacado. Otro punto clave es qué hará Suecia. Para Finlandia lo ideal sería que ambos países nórdicos hagan un frente común y soliciten su ingreso al mismo tiempo, según indicó la primera ministra finlandesa, Sanna Marin. Sin embargo, Finlandia tiene claro que una eventual negativa de Suecia, donde el respaldo a la OTAN es algo menor, no cambiará ni frenará sus planes.