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Así era el Villa de Pitanxo, el barco gallego que ha naufragado en Canadá

Este pesquero, con casi dos décadas de historia, ha sufrido un hundimiento esta madrugada en aguas canadienses de Terranova y hay, al menos, 10 fallecidos.

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Así era el Villa de Pitanxo, el barco gallego que ha naufragado en Canadá

El pesquero Villa de Pitanxo, con base en la localidad de Marín (Pontevedra) y propiedad del armador Manuel Nortes, se ha hundido esta madrugada en las aguas canadienses de Terranova con un total de 24 marineros a bordo, de los cuales 16 son españoles y el resto son peruanos y ghaneses. Es uno de los naufragios más graves que ha sufrido una flota pesquera española en las últimas décadas.

Por el momento, al menos 10 tripulantes han perdido la vida y otros 11 siguen desaparecidos, mientras que los otros tres han sido localizados en un estado de “shock hipotérmico”, según ha precisado Maica Larriba, subdelegada del Gobierno de Pontevedra. Desde las autoridades piden prudencia a los servicios de rescate autorizados, aunque muestran su inquietud y preocupación por lo sucedido este martes.

En cuanto a las labores de rescate, varios pesqueros que se encontraban en la zona, entre ellos en Novo Virxe de Barca, portugués y el Playa de Menduiña 2, de Galicia, han actuado para hacer frente al naufragio de este pesquero. De hecho, uno de ellos localizó los cuatro cadáveres y los tres supervivientes. No obstante, la cuarta balsa sigue sin encontrarse tras haberse perdido el rastro por la fuerte marea.

¿Cuál era la función del Villa de Pitanxo?

El Villa de Pitanxo era uno de los pesqueros destinados a la captura de especies propias de estas aguas canadienses, como la gallineta nórdica, el camarón boreal o el bacalao, entre otros, y aparece registrado en el censo de arrastreros congeladores de la Organización de pesquerías del Atlántico Noroeste (NAFO), organismo que regula la actividad acuática al este de Canadá de estas tripulaciones.

La historia de este barco data del año 2004, cuya construcción fue originada por el astillero vigués MCíes, que quedó en un segundo plano tras la entrada de su empresa en el concurso de acreedores. Además, este pesquero blanco y azul oscuro contaba con una potencia de más de 870 kilovatios para ser uno de los buques más reconocidos en esta actividad. Además, tenía una capacidad de carga superior a las 1.120 toneladas, cuyas dimensiones oscilaban los 50 metros de largo, diez de ancho y 825 de arqueo.