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Descalifican a 43 camellos de un concurso de belleza por llevar bótox

El Festival Rey Abdulaziz de los Camellos, concurso de belleza muy popular en Arabia Saudí, ha detectado "manipulaciones" estéticas en muchos animales.

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Descalifican a 43 camellos de un concurso de belleza por llevar bótox.

Un atípico concurso de belleza, ya que sus protagonistas son los camellos, en Arabia Saudí se ha visto salpicado por la polémica. Según informa la agencia oficial del país asiático SPA, hasta 43 participantes han sido descalificados de este importante festival al haberse encontrado "manipulaciones", como inyecciones de bótox o estiramientos faciales.

Estas prácticas, que están prohibidas en este tipo de concursos, se han realizado para dotar a los animales de una mejor apariencia de cara al jurado. Sin embargo, un comité médico especializado, que revisó a los camellos antes de que se celebrase el evento para observar cualquier tipo de irregularidad, detectó estas "manipulaciones".

Tras las revisiones, el comité médico del Festival Rey Abdulaziz de los Camellos, nombre oficial de este concurso de belleza que celebraba su sexta edición, detectó hasta 16 casos de inyecciones de bótox y 27 estiramientos faciales en los camélidos. Según la agencia SPA, este es el mayor número de modificaciones estéticas que se ha detectado en la corta historia de este evento.

Premios de millones de dólares

En este tipo de concursos, que constan de una gran popularidad en el golfo Pérsico, los dueños de los animales suelen usar rellenos en las pestañas para resaltarlas o bótox con el objetivo de disimular los tics y señales nerviosas que tienen estos curiosos participantes, además de servir para relajar el morro.

Al ser una práctica habitual, a la par que ilegal, la administración del festival "está realizando grandes esfuerzos para combatir todas las formas de manipulación que algunos participantes utilizan para embellecer al camello". Según la agencia SPA, la finalidad es "mejorar su apariencia general con el objetivo de aumentar su precio, engañar a quienes quieran comprarlo y obtener un premio" que suele ascender a millones de dólares.